Buchanan arrebata la victoria a Dole en New Hampshire por un pu?ado de votos
Patrick Buchanan, el populista ultraconservador que ha mov¨ªlizado, las fuerzas de extrema derecha para cambiar la faz del Partido Republicano, parec¨ªa anoche el ganador de las elecciones primarias de New Hampshire, que suelen anticipar el nombre del futuro candidato a la presidencia. Seg¨²n los resultados adelantados por las cadenas de televisi¨®n a las tres de esta madrugada, tanto Bob Dole como Lamar Alexander estaban distanciados de Buchanan tan s¨®lo en unos cuantos cientos de votos, aunque ninguno de ellos parec¨ªa tener ya posibilidades de victoria.
Los datos facilitados por la cadena CNN daban un 28% devotos a Buchanan, un 25% a Dole y un 23% a Alexander, lo que le permiti¨® a la cadena dar a Buchanan como ganador. Los seguidores de Buchanan celebraban ya el ¨¦xito de su candidato.Tambi¨¦n para Lamar Alexander, quien hasta hace apenas una semana era un completo desconocido, estos resultados constituyen un triunfo, puesto convierten al ex gobernador de Tennessee en una alternativa frente al radicalismo de Buchanan y la debilidad de Dole.
Bob Dole, el candidato con m¨¢s apoyos institucionales, con m¨¢s dinero y con mas experiencia en la pol¨ªtica, no pierde totalmente sus aspiraciones presidenciales, pero deja en evidencia que no es el candidato indiscutible para los republicanos en estos momentos. Con una participaci¨®n electoral r¨¦cord, el estado de New Hampshire deja la carrera electoral en el Partido Republicano reducida a esos tres hombres -Steve Forbes obtuvo s¨®lo el 11% de los votos- Pero New Hampshire no sido capaz esta vez de presentar el rostro del favorito a la denominaci¨®n. Al contrario, de estas primarias sale un Partido Republicano dividido entre conservadores moderados y radicales.
La amenaza del voto 'ultra'
Un pu?ado de muchachos a bordo de una camioneta, claros exponentes del lumpen local, fue capaz de acallar con sus gr¨ªtos a Pavor de Pat Buchanan una peque?a manifestaci¨®n reunida el lunes por la noche en apoyo a Bob Dole en el centro de Milford, en el Estado norteamericano de New Hampshire. Con una agresividad ins¨®lita en un acto pol¨ªtico en Estados Unidos, la pandilla insult¨® a unos cuantos seguidores de Bill Clinton, para el que promet¨ªan la c¨¢rcel, y desvi¨® por un rato la atenci¨®n de quienes pretend¨ªan escuchar a Dole. Era imposible reconocer en aquel grupo al viejo Partido Republicano de Abraham Lincoln. Pat Buchanan y sus ideas extremistas, proteccionistas y xen¨®fobas amenazan con abrir una profunda divisi¨®n en ese partido, cuyo futuro parece en juego en esta campa?a electoral, m¨¢s all¨¢ de los resultados de las primarias en New Hampshire.Frente a ese grupo de seguidores de Buchanan, un corresponsal extranjero -m¨¢s a¨²n, de acento espa?ol- se sent¨ªa no ya ignorado, sino intimidado. De hecho, en otro acto pol¨ªtico ese mismo d¨ªa, Pat Buchanan esquiv¨® una pregunta inc¨®moda de uno de esos periodistas respondiendo: %Usted de d¨®nde es? ?Corresponsal extranjero? Dejemos que mejor hablen los americanos`
Todo este clima creado con discursos en los que Buchanan apela al pueblo a desplazar del poder a Wall Street, incita a la rebeli¨®n contra los capitalistas "sin alma ni coraz¨®n", culpa a M¨¦xico, Jap¨®n o China de todos los males que sufren los norteamericanos y exhorta a defender la fe cristiana de los ataques de los medios de comunicaci¨®n ha creado gran preocupaci¨®n dentro de la direcci¨®n del Partido Republicano, que se ha convertido en el principal enemigo de Buchanan.
Falta de dinero
"En Washington, todos los caballeros y barones est¨¢n escondi¨¦ndose en sus castillos y alzando los puentes urgentemente porque los campesinos vienen persigui¨¦ndolos con horcas", ha declarado Buchanan, en apocal¨ªptica descripci¨®n del considerable respaldo que hasta el momento ha conseguido su candidatura. Los m¨¢s optimistas conf¨ªan en que, como ha ocurrido antes, en otros procesos de elecciones primarias, el fen¨®meno Buchanan se consumir¨¢ pronto, y que el impetuoso comentarista que escribi¨® discursos para Richard N¨ªxon y Ronald Relagan no tendr¨¢ dinero ni apoyo para repetir en otros Estados los buenos resultados conseguidos hasta ahora.
Pero, por si acaso, las fuerzas republicanas m¨¢s ortodoxas han comenzado a reaccionar contra Buchanan, para quien Franco fue uno de los ¨ªdolos de su juventud. Incluso uno de los principales representantes de la revoluci¨®n conservadora que Newt Gingrich llev¨® al Congreso norteamericano, John Kasich, presidente del Comit¨¦ de Presupuesto de la C¨¢mara de Representantes, ha advertido que el de Buchanan "no es el mensaje conservador que los nuevos republicanos proponen".
"Los puntos de vista de Buchanan son una amenaza para la unidad del Partido Republicano y de todo el movimiento conservador", afirma Adam Meyerson, de la organizaci¨®n conservadora Heritage Foundation.
Dos de los grandes gurus del moderno conservadurismo norteamericano, Grover Norquist y William Kristol, han levantado su voz contra Buchanan, aunque comparten muchas de las ideas de su programa social, como la prohibici¨®n del aborto y la oraci¨®n en las escuelas. "Buchanan dice que trata de reconstruir la coalici¨®n de Reagan, pero Reagan no expuls¨® a los empresarios. Buchanan dice que cree en la pol¨ªtica econ¨®mica de Reagan, pero Reagan no ped¨ªa m¨¢s barreras al comercio" sostiene Norqu¨ªst. "Buchanan no puede ganar la denominaci¨®n como candidato republicano, pero puede hacer un da?o irreparable al candidato que sea elegido", opina Kristol.
Uno de los m¨¢s respetados columnistas conservadores, George Will, asegura que "el conservadurismo de Buchanan es proteccionismo y otros ingredientes de lo que los liberales llaman pol¨ªtica industrial".
Pat Buchanan ha prometido, si es elegido presidente, subir un 10% los aranceles (impuestos a la importaci¨®n) a los productos procedentes de Jap¨®n, un 20% a los de China (el recargo a este pa¨ªs es por su actitud hacia Taiwan) y construir un muro en la frontera con M¨¦xico, "protegido por el Ej¨¦rcito si es necesario". "Escucha, Jos¨¦", dice Buchanan en despectiva referencia a los inmigrantes hispanos, "tu hora en este pa¨ªs se ha terminado".
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