Augusto Monterroso: "El escritor repite lo mismo en todas sus obras"
El autor guatemalteco prepara un libro sobre sus memorias de juventud
Es tan breve como su obra. Augusto Monterroso (Honduras, 1921) atraves¨® t¨ªmidamente los escasos metros que le separaban del micr¨®fono, se sent¨® ruborizado tratando de no arrugar su traje pr¨ªncipe de gales y esper¨® las preguntas. "En las f¨¢bulas contempor¨¢neas, las moralejas ya no sirven para nada. Nadie desea que le digan c¨®mo comportarse", asegur¨® ayer el autor, que se encuentra en Madrid para participar en el ciclo Grandes Escritores del Mundo, organizado por la Biblioteca Nacional, donde hoy dicta una conferencia bajo el t¨ªtulo El otro Aleph.
Monterroso, que ha elegido la f¨¢bula y el cuento como piezas centrales de su obra, explic¨® que estas formas literarias son aplicables a cualquier ¨¦poca y sociedad. "De la f¨¢bula se espera que tenga un sentido cr¨ªtico y moral, pero en mi caso se trata de una s¨¢tira dirigida a la sociedad y no a determinadas formas de conducta".El autor de La oveja negra y otras f¨¢bulas aclar¨® que su ¨²nico fin al escribir es convertir lo cotidiano en algo perdurable. "Mis personajes son comunes y corrientes y nunca parto de situaciones fant¨¢sticas. En cuanto al lenguaje, procuro que sea lo mejor posible; trato de mantener la concisi¨®n e incluso una brevedad y econom¨ªa de medios para lograr que el lector no se me escape".
Entre las cosas que m¨¢s le interesan en la vida se cuenta la literatura. Monterroso cit¨® al poeta mexicano Manuel Guti¨¦rrez Najera "Era triste y vulgar lo que cantaba, mas que canci¨®n tan bella la que o¨ªa" para apoyar las dudas del artista sobre el resultado final de la obra: "El escritor oye una canci¨®n muy bella e imagina formas profundas y verdaderas, pero llevadas a la realidad de la palabra es frustante. Nunca el artista logra reflejar todo aqueIlo que quisiera decir, siempre se queda frustrado ante la imposibilidad de pasar a palabras lo que escuch¨®".
La meta de este autor, que vive exiliado en M¨¦xico desde 1944, es escribir cada vez menos, pero sin dejar de hacerlo. "Ya escrib¨ª demasiados libros, ya he intentado muchos g¨¦neros y cada vez encuentro menos". Su exquisita y breve obra se ver¨¢ ampliada en el futuro con sus memorias de juventud. "A los 15 a?os sent¨ª que me iba a dedicar a la literatura. En esta obra contar¨¦ c¨®mo logr¨¦ vencer todo lo que me quiso apartar de ese mundo, como la participaci¨®n pol¨ªtica".
A lo largo de su carrera s¨®lo ha tratado de explicar lo que supone ha dicho mal en los anteriores libros, aunque "uno repite lo mismo en todas sus obras". Monterroso a?di¨® que se sent¨ªa decepcionado con muchos de los libros que se publican -"los m¨ªos los primeros"- y que como lector se vuelve m¨¢s exigente a medida que pasa el tiempo. El autor de Movimiento perpetuo, que ha apoyado procesos revolucionarios y defendido el socialismo, no quiso hablar de pol¨ªtica: "Uno de los principios que he adoptado es no invadir terrenos que no me corresponden, como las opiniones pol¨ªticas, a menos que trate de expresarlas por medio de la literatura".
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