El amante de Ias estrellas

Como tantas otras jornadas laborables, el kil¨®metro cero de Madrid era un hervidero de gente de variopintos pelajes a las doce de la ma?ana, hora en la que irrumpi¨® en la Puerta del Sol un grupo de estramb¨®ticos personajes. Dec¨ªan ser alumnos de una escuela de cosmonautas, dedicados a hacer viajes interespaciales por J¨²piter, Marte y otros planetas con total naturalidad. Uno de sus principales objetivos, dentro de su cotidiano aprendizaje, era conseguir que el madrile?o oso, el del madro?o, cuya raqu¨ªtica estatua lleva a?os en la popular plaza, se aparee con la Osa Mayor, ya que se corre el peligro de que ¨¦sta no tenga descendencia.Dado que el novio sufre de par¨¢lisis cr¨®nica, estos bienintencionados cosmonautas estaban dispuestos a ser los portadores de tan preciado semen para dilucidar si ¨¦ste era compatible con el de la constelaci¨®n. Pero en el momento en que se subieron a la estatua y todo el personal daba por hecho que al r¨ªgido animal le iban a practicar el tratamiento de On¨¢n, lleg¨® la polic¨ªa e impidi¨® el desatinado acto.

Ah¨ª todos se tuvieron, que delatar. Se trataba del grupo Nas¨² de teatro, que con motivo del estreno de su espect¨¢culo Sigue volando, el pr¨®ximo d¨ªa 15 en la sala Tri¨¢ngulo, se presentaba ante la prensa en plena. Puerta del Sol haciendo lo mismo que plantean en su montaje esc¨¦nico, dirigido a un p¨²blico sin edad, en el que unos payasos muestran un d¨ªa cualquiera en una escuela de cosmonautas. A., fin de cuentas estos c¨®micos son expertos en t¨¦cnicas de payasos, sobre las que vienen investigando y experimentando hace a?os.

Su experiencia en la Puerta del quiz¨¢ les haya servido para sus trabajos sobre el escenario. "No hay permiso para hacer esto", dec¨ªa la polic¨ªa. "Si nos vamos enseguida", protestaba uno del grupo. "Si s¨¦ hiere a un transe¨²nte, luego aqu¨ª no hay nadie responsable", alegaba el funcionario. "Pero si no hemos hecho nada malo", insist¨ªa el teatrero. "S¨ª. claro, como los de la droga", matizaba el municipal Un poco fuertes las coniparaciones", refunfu?aba el c¨®mico por lo bajini.

Mientras sus compa?eros segu¨ªan su happening por la plaza, con grandes bidones pretendidamente espaciales y todo tipo, de explicaciones de por qu¨¦ el oso, del madro?o deb¨ªa copular con la Osa Mayor, ¨¦l tuvo que identificarse y quedar fichado para la posteridad.

"Abusande los mayores, que se creen que somos tontos, esto est¨¢ claro que es un choteo", se?alaba un jubilado, y le respond¨ªa otro: "?Natural!, si esto debe de ser una broma, hombre".Sigue volando. Sala Tri¨¢ngulo. Del viernes 15 de marzo hasta el 6 de abril. De mi¨¦rcoles a s¨¢bado a las 22.30. Entrada, 1.400. Para estudiantes, carn¨¦ joven y otros, 800.