Tres muertos y 23 heridos
La primera carta bomba atribuida a Unabomber se remonta al 25 de mayo de 1978. El paquete se encontr¨® en un aparcamiento p¨²blico y se envi¨® a la direcci¨®n del remite, la Northwestern University en Evanston. Un hombre result¨® herido al abrirlo. El recorrido total de los siguientes 15 env¨ªos, que arroja un balance de tres muertos y 23 heridos, tuvo como destinatarias universidades -de ah¨ª el apodo de Unabomber- empresas, l¨ªneas a¨¦reas y tiendas de ordenadores. En diciembre de 1994 y abril de 1995, un ejecutivo publicitario de New Jersey y el presidente de un grupo de presi¨®n de explotaci¨®n forestal de California mueren al recibir el correo terrorista. Unabomber consigue llamar la atenci¨®n de todo el pa¨ªs y se dedica a escribir cartas a peri¨®dicos, a una antigua v¨ªctima y a un profesor universitario. En junio de 1995 amenaza con volar el aeropuerto de Los ?ngeles. Tras la histeria desatada, dice que era una broma y que detendr¨¢ sus env¨ªos si The New York Times y The Washington Post le publican un ensayo titulado La sociedad industrial y su futuro. El 19 de septiembre del a?o pasado los dos diarios aceptan "por razones de seguridad p¨²blica" y costean los gastos de la edici¨®n de un suplemento especial en el Post en el que se publicaron las 35.000 palabras. La tesis del ensayo es que la tecnolog¨ªa ha deshumanizado la sociedad con consecuencias desastrosas. "La sociedad moderna es impersonal, antiindividualista y desestabilizadora". Unabomber est¨¢ convencido de que "no es posible establecer un compromiso definitivo entre tecnolog¨ªa y libertad".
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.