EE UU devolver¨¢ a Jap¨®n el 20% del territorio de las bases de Okinawa
Estados Unidos anunci¨® ayer un nuevo paso en el cierre de sus bases militares de la isla japonesa de Okinawa. El secretario de Defensa de EE UU, William Perry, y el ministro japon¨¦s de Asuntos Exteriores, Yukihiko lkeda, firmaron un acuerdo para la reducci¨®n, en un 20%, del tama?o de 11 bases militares estadounidenses en Okinawa.El objetivo es cerrar "lo antes posible siete de esas bases y reducir el tama?o de las otras cuatro". Con este acuerdo, EE UU devolver¨¢ a Jap¨®n el 20% del territorio que ahora ocupan sus bases, unas 4.800 hect¨¢reas. Las autoridades japonesas anunciaron que destinar¨¢n ese territorio liberado a parques.
Las tres cuartas partes de las bases estadounidenses y la mitad de los 47.000 efectivos desplegados en Jap¨®n est¨¢n en Okinawa. Las instalaciones militares en esta isla, 1.000 kil¨®metros al sur de Tokio y la m¨¢s cercana a China y Corea, son las mayores que mantiene EE UU en Asia desde el cierre, en 1992, de las que manten¨ªa en Filipinas.
La reducci¨®n del 20% del territorio de las bases militares no implicar¨¢ ninguna rebaja en el n¨²mero de efectivos desplegados por EE UU en las bases japonesas. "Hemos decidido mantener el n¨²mero de hombres en Jap¨®n, as¨ª como un total para Asia de 100.000", asegur¨® Perry.
El secretario de Defensa y el ministro de Exteriores firmaron otros dos acuerdos en la v¨ªspera de la llegada de Bill Clinton en visita oficial a Tokio referentes al apoyo log¨ªstico japon¨¦s a las fuerzas armadas estadounidenses en casos de emergencia.
El primer ministro japon¨¦s, Ruytaro Hashimoto, calific¨® ayer la prevista visita de dos d¨ªas de Clinton como "la cumbre m¨¢s importante desde el final de la guerra fr¨ªa". Clinton llegar¨¢ a ¨²ltima hora de hoy a Tokio, tras una breve visita a Corea.
La poblaci¨®n de Okinawa se rebel¨® contra las bases tras la violaci¨®n, el pasado mes de septiembre, de una ni?a de 12 a?os a manos de tres soldados estadounidenses. Una de las bases que se clausurar¨¢ es precisamente la de marines de Futenma, de donde proced¨ªan los autores de la agresi¨®n sexual.
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