El Barca masca el titulo con ansia

El Barcelona es, probablemente, el mejor equipo del mundo. Su juego de ayer contra el Elgorriaga en la final de la Copa de Europa no fue tan brillante como podr¨ªa deducirse del marcador (23-15); de hecho, se not¨® mucho la ausencia de su cerebro, Xavier O'Callaghan. Pero, si es tan eficaz a pesar de esa baja, todo indica que el club catal¨¢n ganar¨¢ el pr¨®ximo viernes en balonmano lo que no ha podido lograr en f¨²tbol y baloncesto."Vis?a el Barca y Vis?a Catalunya", gritaban con gran ¨ªmpetu los seguidores azulgrana durante los ¨²ltimos minutos mientras su equipo manten¨ªa ocho goles de ventaja. La ansiedad por un t¨ªtulo era tal que el p¨²blico quer¨ªa a¨²n m¨¢s y abroncaba el juego lento del equipo vasco. Por si la afici¨®n no estuviera ya suficientemente motivada, Svenson no par¨® de azuzarla.

El Barcelona de los primeros cinco minutos hizo honor a su cl¨¢sica virtud: la velocidad. Los dos primeros ataques del Elgorriaga se tradujeron en dos contraataques letales de su rival. Masip, pegajoso y tenaz como una nube de mosquitos en el puesto avanzado de la formaci¨®n 5-1 en defensa, y Urdangarin, convertido en un lanzador de misiles teledirigidos, rompieron el partido nada m¨¢s empezar. Los azulgrana, que mostraban hambre de victoria, ganaban por 5-1 a los 10 minutos.

Por el contrario, el Elgorriaga parec¨ªa desganado; tanto, que s¨®lo marc¨® tres goles en 20 minutos (8-3). A partir de ah¨ª, el equipo vasco empez¨® a parecerse un poco a s¨ª mismo; y su portero, Barreto, se dio el gran placer de meterle un gol a Svensson de porter¨ªa a porter¨ªa. Pero esos cinco goles fueron una pauta que marc¨® las diferencias en el marcador durante casi todo el duelo.

Los iruneses ten¨ªan motivos para jugar mal. Perun¨ªcic no est¨¢ ni al 50% tras una lesi¨®n de dos meses; Mar¨ªn espera el fin de la temporada para ir al quir¨®fano; Ord¨®?ez, un lateral de formidables facultades, parece destinado a retirarse sin superar su timidez en la cancha; y los extremos rinden menos que el a?o pasado. Es decir, s¨®lo el ruso Kiselev, Etxaburu y los porteros dan el nivel que se requer¨ªa ayer.

Por el contrario, el Barcelona mostr¨® muy pocas fisuras y machac¨® a su rival cada vez que ¨¦ste amenaz¨® con remontar. Cuando el Elgorriaga lograba por fin que su muro defensivo en 6-0 acreditase, la fama adquirida, Garralda, Masip y Ortega daban la raz¨®n al entrenador irun¨¦s, Juantxo Villarreal: "En el uno contra uno, son magn¨ªficos".