Una historia en tres actos

Con el auto del Tribunal Superior de Justicia de Catalu?a (TSJC) de ayer, es la tercera vez que una investigaci¨®n sobre los avatares del aval a Subir¨¢ y Compa?¨ªa acaba en lo mismo: archivo por falta de indicios suficientes. La primera investigaci¨®n corri¨® a cargo del fiscal Carlos Castresana -actualmente en la fiscal¨ªa anticorrupci¨®n-, siguiendo las indicaciones de Carlos Jim¨¦nez Villarejo -ahora fiscal anticorrupci¨®n-. Fue en el oto?o de 1992. El aval de Subir¨¢ fue uno de los examinados en la fiscal¨ªa, que concluy¨® la in vestigaci¨®n elevando una pro puesta al entonces fiscal general del Estado, Eligio Hern¨¢ndez, para actuar contra el consejero de Industria, Antoni Subir¨¢, y otro miembro del Gobierno catal¨¢n, adem¨¢s de otros cuatro ex consejeros.El fondo del asunto era, en opini¨®n del fiscal, que los consejeros incurrieron en malversaci¨®n de caudales p¨²blicos por conceder ayudas, en forma de avales p¨²blicos, de manera irregular a empresas y no recuperar despues lo prestado. Se daba la circunstancia de que algunas empresas destinatarias de los avales estaban controladas por familiares o amigos de altos cargos de la Administraci¨®n catalana. Hern¨¢ndez se opuso a la propuesta de los fiscales de Barcelona y rechaz¨® emprender 'acciones por algo que, seg¨²n sus palabras, no era delito aunque desprend¨ªa "aroma de corrupci¨®n".

La segunda ocasi¨®n fue en el Juzgado, de Instrucci¨®n n¨²mero 13 de Barcelona por un supuesto delito fiscal. En ese caso, Subir¨¢ no era el objeto de la investigaci¨®n de forma directa. Lo que juez y fiscal miraban era una irregularidad fiscal en la transacci¨®n de la sociedad utilizada para el pago del aval, Frisolca. Es decir, en los n¨²meros de una sociedad inactiva que instrument¨® el pago de los 58 millones de pesetas de la deuda del aval de Subir¨¢ y Compa?¨ªa. El asunto tambi¨¦n acab¨® en archivo.

La ¨²ltima, la zanjada por el auto de ayer, se inici¨® por la denuncia de un particular que se limit¨® a aportar recortes de prensa por los pol¨¦micos avales. Otro juzgado de Barcelona, el de instrucci¨®n n¨²mero 19, se hizo cargo del asunto y, para empezar, pidi¨® el informe que la fiscal¨ªa de Barcelona envi¨® dos a?os antes a Hern¨¢ndez. De todos los avales, el juez decidi¨® separar el recibido por Subir¨¢ y Compa?¨ªa e investigarlo. En noviembre de 1994,-el juez remiti¨® el asunto al TSJC porque consider¨® que exist¨ªan indicios de cohecho por parte del consejero. Este caso es el archivado por el Tribunal Superior, para el que s¨®lo hay "suposiciones" o "conjeturas".