"Me apasionan todas las cosas antiguas"
"No puedo justificar que un m¨²sico de jazz nunca gane los millones que recibe un roquero", dijo Charlie Watts, de 55 a?os, en 1969. El bater¨ªa de los Rolling Stones, que conoce y aprecia ambos g¨¦neros, todav¨ªa no acierta a comprender las razones de semejante disparidad entre unos y otros artistas. "El rock and roll es popular en todo el mundo, pero, aun as¨ª, no es motivo suficiente", dec¨ªa hace unos d¨ªas en Londres.El jazz fue el primer gran amor de su adolescencia, pero eligi¨® el rock como ruta profesional poco despu¨¦s. A pesar de ello, Watts tuvo tiempo, en 1960, de redactar e ilustrar un libro sobre Charlie Parker. Y para celebrar- su segunda edici¨®n, tres d¨¦cadas m¨¢s tarde, el famoso bater¨ªa fund¨® su propio quinteto de jazz, con el que grab¨® un par de compactos y dio una serie de recitales en homenaje a Bird, el gran saxofonista.
En su nuevo proyecto discogr¨¢fico, Long ago and far away, Watts mira nost¨¢lgicamente al pasado. Acompa?ado por la London Metropolitan Orquestra y por el vocalista Bernard Fowler, el quinteto recupera baladas y canciones populares de los Gershwins, Cole Porter, Duke Ellington, Hoagy Carmichael y Louis Armstrong, entre otros compositores.
Pregunta. ?Incluye en Long ago far away canciones que sol¨ªa tocar en ese banjo que destroz¨® hasta convertirlo en su primera bater¨ªa?.
Respuesta. Son anteriores a esa fase en la que, harto de aprender el banjo, le cort¨¦ el m¨¢stil. Necesitaba una bater¨ªa porque aspiraba a tocar como Chico Hamilton. Pero en este disco he seleccionado canciones que mi madre sol¨ªa cantarme de ni?o o que mi t¨ªa descubr¨ªa en las listas de grandes ¨¦xitos de la ¨¦poca. Todas ellas forman parte de mi colecci¨®n de m¨²sica de jazz desde hace unos treinta a?os.
P. Transportan al oyente a los a?os cuarenta y parecen revivir im¨¢genes del viejo Hollywood. ?Es usted nost¨¢lgico?.
R. Debo serlo, porque me apasionan todas las cosas anti-guas. Mi casa es antiqu¨ªsima y est¨¢ llena de objetos y muebles que colecciono desde hace a?os. Conservo todos mis viejos discos en vinilo y no permito la entrada de compactos en casa. Quise grabar el disco con el efecto de un directo y en un estilo pasado de moda. No hay temas, nuevos, porque presentamos unas canciones preciosas y rom¨¢nticas con versos que ya nadie utiliza como I'm in the mood for love (estoy de humor para amar). Dibujan im¨¢genes de Humphrey Bogart y, en particular, de Fred Astaire en Cantando bajo la lluvia. Evocan una era del pasado.
P. A pesar de ser el l¨ªder, las canciones que ha seleccionado no admiten s¨®los de bater¨ªa.
R. Prefiero tocar sutilmente que alardear con la bater¨ªa. Con los Stones, mi estilo es m¨¢s en¨¦rgico, que con quinteto. Son armas de tocar diferentes, y abmas me gustan. Me divierte tocar estas canciones; ese es el principal motivo del disco. Adem¨¢s no queda mucha gente viva capaz de cantar bien estos temas. Se necesita un vocalista especial como Bernard cuyo estilo no es propio de un cantante de jazz, para cantar frente a una orquesta como si se tratara de Pavarotti.
P. ?Por qu¨¦ ha tardado tanto tiempo en regresar al jazz, un g¨¦nero que le apasiona desde que cumpli¨® 13 a?os?
R. Siempre hay un momento oportuno para realizar las cosas. Antes no tuve tiempo ni ganas. Pienso, adem¨¢s, que no hubiera funcionado, porque necesit¨¢bamos toda nuestra concentraci¨®n para sacar adelante el trabajo de los Stones. La dispersi¨®n hacia proyectos en solitario no hubiera ayudado en absoluto. Pero no estoy interesado en iniciar una carrera en el jazz. Ya tengo una con los Stones. Mi primer compromiso es con el grupo, porque soy un rolling stone. Ese soy yo, mientras que con el quinteto satisfago una parte de m¨ª que los Stones no pueden llenar: tocar con una orquesta de cuerdas y dejar que Bernard cante los temas de los mejores compositores de la historia. Acompa?o a Bernard cuando canta Brown Sugar con los Stones, y ahora, cuando entona una canci¨®n de Gershwin. Ambos ejercicios son divertidos.
P. ?Qu¨¦ opina el resto de los stones de esta forma de diversi¨®n?
R. Keith me apoya incondicionalmente. Fue el primero en acercarse al homenaje que dedicamos a Charlie Parker en Nueva York, Y desde entonces no se pierde un concierto. A Mick le interesa menos este tipo de cosas, pero no obstante vino al estudio mientr¨¢s grab¨¢bamos el disco. El me present¨® a Bernard, que le acompa?¨® como vocalista en su gira y colabor¨® despu¨¦s en los dos ¨²ltimos discos de los Stones. A Keith y a Mick s¨®lo les preocupa que yo est¨¦ bien y que mis discos funcionen. No hay lugar para escenas de celos, porque estos proyectos nada tienen que ver con los Rolling Stones.
P. ?Cu¨¢les son sus planes inmediatos?
R. Debo resolver el problema de los Conciertos. Me gustar¨ªa salir de gira. No soy un buen l¨ªder, ya que cambio de opini¨®n constantemente y me cuesta tomar decisiones. El a?o 1997 lo dedicar¨¦ a los Stones, porque vamos a sacar otro disco.
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