Jordan apabulla a Seattle

Con los dioses no se juega. El instinto de Michael Jordan de asolar a su rival se manifest¨® en su totalidad el domingo en Seattle. Su sonrisa amena y capacidad para vender zapatillas Nike y hamburguesas MeDonald's es una imagen falsa. Dentro de la cancha Jordan siempre ha sido cruel y calculador, el hijo de Gengis Khan.Es su derecho y deber. Jordan, a los 33 a?os, sigue supremo porque nunca ha renunciado a los fundamentos del deporte. El baloncesto es como f¨²tbol: defensa, media cancha y ataque. Ninguna estrella baja m¨¢s que Jordan en ambas canastas.

La final se ha convertido en una pel¨ªcula con muchas secuencias. Dennis Rodman de nuevo sac¨® de quicio a los hombres grandes de Seattie. Por segunda vez en tres partia.. dos el reserva Frank Br¨ªckowski fue expulsado por una falta intencionada sobre Rodman. Pero el libreto se centra siempre en Jordan. Lo que le hizo a los Sonics en su propia cancha fue espectacular, otro partido ensancha su mito. Entr¨® en guarida del le¨®n y lo degoll¨® un solo golpe. Marc¨® 12 puntos en el primer cuarto, 15 el segundo, todos consecutivos, y 36 en total.

Su furia y desprecio no tuvo l¨ªmite. Chicago ganaba el partido por 34-12 cuando a¨²n restaban 1.20 minutos del primer, periodo. Cada reacci¨®n de Seattle fue contestada por Jordan. Cuando los Sonics se pusieron en 45-31 con cuatro minutos por jugar en la primera mitad, Jordan explot¨®. La abri¨® con cuatro tiros libres. Sigui¨® con un tiro desde cinco metros y otro en suspensi¨®n desde seis, luego clav¨® un triple desde ocho metros. Para variar, anot¨® otro tiro desde cinco metros y medio y cerr¨¦ con dos tiros libres. Cuando Scottie Pippen puso el bal¨®n en la canasta para finalizar la primera mitad Chicago dominaba ya por 62-38.

"Qu¨¦ paliza", afirm¨® George Karl, el t¨¦cnico del Seattle. "Michael estaba casi imparable. No tenemos nada a favor. Hay muchas cosas bonitas en el deporte. En este momento estamos sufriendo lo peor. Nos azotaron. Es la primera vez en esta serie que Chicago juega con el instinto asesino".

Los Sonics siguen con pulso, pero su suerte est¨¢ echada. Ning¨²n equipo en el medio siglo de existencia de la NBA ha remontado un 3-0 en una serie por eliminaci¨®n. Igual que Orlando, Seattle subestim¨® las ganas de Jordan y su equipo. Por algo los Bulls han batido la marca de victorias durante la temporada regular con 72. Su registro en los play offs tampoco tiene precedentes, 14-1. Quiz¨¢s las estad¨ªsticas no mienten. Esta versi¨®n de Chicago puede llegar a ser el mejor equipo de la historia, de la NBA.

"Palpamos una oportunidad. para definir esta serie", declar¨® Jordan. "Hay que ser un asesino cuando juegas fuera de casa. Lo hemos hecho durante todo el a?o. No es una variante reciente. En mis cuatro finales de Liga hemos ganado 9 de 10 partidos fuera de casa. Qu¨¦ m¨¢s se puede decir sobre el car¨¢cter de nuestro equipo".

S¨®lo una frase: con los dioses no se juega.