Un testigo nazi presentado por el fiscal declara en favor de Priebke

Erich Priebke, el nazi de 82 a?os que el 8 de mayo comenz¨® a ser juzgado en Roma por su participaci¨®n en el asesinato de 35 italianos perpetrado en las Fosas Ardeatinas, el 27 de marzo de 1944, se encuentra mucho m¨¢s cerca de una posible absoluci¨®n gracias a un testigo presentado por el fiscal en el proceso. Karl Hans, de 84 a?os, jefe del contraespionaje de las SS y magistrado en Roma en el a?o de autos, cambiando un testimonio anterior, declar¨® ayer que Priebke no pod¨ªa negarse a realizar las ejecuciones que hizo, porque habr¨ªa sido liquidado ¨¦l mismo.La declaraci¨®n de Hans cay¨® como un golpe de teatro en el proceso. La llegada del testigo de las SS, que acusaba al ex capit¨¢n en el banquillo no s¨®lo de la matanza de las Fosas Ardeatinas, sino del asesinato del sindicalista Bruno Buozzi y de la deportaci¨®n de Mafalda de Saboya al campo de concentraci¨®n alem¨¢n, donde encontrar¨ªa la muerte, deber¨ªa haber dado un aceler¨®n decisivo al proceso, seg¨²n el fiscal Antonino Intelisano.

Pero ya el s¨¢bado se entendi¨® que algo se hab¨ªa torcido. Sobre las cuatro de la madrugada, tras haber declarado durante cinco horas ante Intelisano en la tarde precedente, Hans cay¨® desde el tejado del hotel romano en que se albergaba, mientras intentaba huir. Fue recogido por dos polic¨ªas que vigilaban la puerta del edificio, para protegerle. "Me quer¨ªa marchar. He sido siempre un informador, y no hablo en p¨²blico. No quiero declarar en el juicio", dijo Hans a Intelisano.

Testimonio indirecto

El anciano nazi, supuestamente relacionado con servicios secretos italianos, resid¨ªa cerca de Mii¨¢n, pero se encontraba en Suiza, en casa de una hija, desde que comenz¨® este caso. Volvi¨® voluntariamente a Roma y estaba en libertad, aunque el juzgado le retuvo el pasaporte. Hans sosten¨ªa que ¨¦l no estuvo en las Fosas Ardeatinas y su testimonio era indirecto. Tras hablar con ¨¦l en un hospital militar, ya que se rompi¨® la pelvis y se da?¨® dos v¨¦rtebras en el intento de fuga, Intelisano insisti¨® al juez para que el testigo fuera interrogado ayer.Y ah¨ª lleg¨® la sorpresa. Ante el acusado, el tribunal y los abogados, protegido por una mampara para que no le filmaran las televisiones, Karl Hans declar¨® ayer que ¨¦l fusil¨® personalmente a dos de las v¨ªctimas del caso y que lo hizo, como Priebke, porque el coronel Herbert Kappler le advirti¨® que ser¨ªa ejecutado inmediatamente si no cumpl¨ªa las ¨®rdenes.

Kappler fue el ¨²nico condenado en un juicio celebrado en 1948 por estos hechos. El resto de los acusados alegaron obediencia debida y fueron absueltos. Kappler huy¨® de la c¨¢rcel en 1977 y muri¨® en 1979.

El fiscal Intelisano cuenta ahora con la grabaci¨®n de una entrevista in¨¦dita concedida por el coronel a la RAI en 1974, en la que dice que la obediencia debida fue mentira y un invento suyo para salvar a sus subordinados.