EL juez interna en M¨¢laga a todos los inmigrantes ilegales de Melilla

Todos los centroafricanos censados hasta esta semana en Melilla, unos 130, ser¨¢n trasladados a dos centros de acogida en M¨¢laga. Los 79 inmigrantes ilegales subsaharianos detenidos el jueves tras provocar varios incidentes violentos lograron entre la madrugada del viernes y la tarde de ayer su ansiado objetivo de cruzar a la Pen¨ªnsula, pero con una orden judicial de internamiento sobre sus cabezas. Ahora vivir¨¢n 40 d¨ªas pendientes de que el Gobierno determine su identidad y su expulsi¨®n del pa¨ªs o su libertad. Los restantes esperaban anoche ser transportados tambi¨¦n a la ciudad andaluza.

El traslado de Melilla a los dos centros de confinamiento en M¨¢laga se est¨¢ produciendo de manera escalonada, seg¨²n el magistrado del juzgado de instrucci¨®n n¨²mero 2, Rafael Benitez Y¨¦benes, que procede a tomarles declaraci¨®n, intenta identificarlos y dicta caso a caso la orden de internamiento.En ese proceso legal se basar¨¢ luego el delegado del Gobierno, Enrique Beamud, para ordenar la expulsi¨®n de Espa?a de los que dispongan de documentaci¨®n en regla o de aquellos cuya identidad y pa¨ªs de origen consiga concretar la polic¨ªa en menos de 40 d¨ªas. Si no lo logran, ser¨¢n puestos en libertad, pero en una precaria situaci¨®n de alegalidad.

El transporte desde el aeropuerto de Melilla a la base a¨¦rea militar malague?a de El Rompedizo de todos los inmigrantes ilegales asentados en la capital norteafricana empez¨® con un grupo de 41 subsaharianos a primera hora de la madrugada del viernes. Se hizo a bordo de dos aviones H¨¦rcules de la compa?¨ªa CASA.

Otro segundo contingente, con 38 centroafricanos, parti¨® con el mismo origen y destino sobre las seis y media de la tarde de ayer. En ambos casos, los inmigrantes iban escoltados por miembros de las unidades especiales de la polic¨ªa enviadas estos d¨ªas a Melilla para reforzar la seguridad de la ciudad.

Las autoridades locales y las organizaciones humanitarias de Melilla ten¨ªan registrados a principios de esta semana a unos 130 subsaharianos ilegales. La mayor¨ªa llevaba en la ciudad meses, y alguno incluso desde hace m¨¢s de un a?o. Proceden sobre todo de pa¨ªses centroafricanos como Senegal, Mafi, Camer¨²n, Costa de Marfil y Nigeria. Recorrieron en cualquier medio de transporte posible varios miles de kil¨®metros huyendo de miserias pol¨ªticas o econ¨®micas con el ¨²nico objetivo de cruzar al primer mundo.

Los cerca de 50 centroafricanos que no han participado esta semana en ninguno de los incidentes violentos que se han reproducido en Melilla y que viv¨ªan incluso en un albergue distinto al destrozado el domingo por los detenidos tambi¨¦n aguardaban anoche su desplazamiento a M¨¢laga porque su estancia en Espa?a es irregular. La mayor¨ªa tampoco dispone de documentaci¨®n. Una docena de subsaharianos ha solicitado asilo pol¨ªtico.

Ambiente de calma

Un peque?o grupo de los subsaharianos confinados en M¨¢laga fueron recogidos en el aeropuerto por la polic¨ªa y el jefe local de Protecci¨®n Civil, Miguel Mu?oz, e ingresaron en el centro de internamiento para extranjeros situado en la capital, que depende de la comisar¨ªa. La mayor¨ªa, sin embargo, fue al Centro Eurolatinoamericano de la Juventud (Ceulaj), una instalaci¨®n del extinto Ministerio de Asuntos Sociales que est¨¢ en la localidad de Mollina, a unos 50 kil¨®metros de M¨¢laga.Los centroafricanos aprovecharon una parte de su primer d¨ªa de confinamiento en M¨¢laga, ya bajo un techo digno, para realizar algunas actividades deportivas en una clima de "calma y tranquilidad". El centro juvenil de Mollina ofrece en general unas buenas instalaciones. Miembros de la Cruz Roja de Antequera se acercaron hasta este albergue para ofrecerles ropa recogida entre una colecta de ciudadanos de la zona.

La operaci¨®n de traslado masivo de los inmigrantes centroafricanos ilegales de Melilla a M¨¢laga ha sido muy cuestionada por varias organizaciones no gubernamentales y humanitarias.

Juan Jos¨¦ Rodr¨ªguez Ugarte, secretario general adjunto de la Comisi¨®n Espa?ola de Ayuda al Refugiado (CEAR), que preside Juan Mar¨ªa Bandr¨¦s, reclam¨® del Gobierno "una actuaci¨®n para atajar el problema de fondo y no salir s¨®lo al paso de las chispas espor¨¢dicas que encienden la mecha con ¨®rdenes de internamiento y expulsi¨®n". CEAR reclama junto a una mejor impermeabilizaci¨®n de las fronteras, una tramitaci¨®n m¨¢s r¨¢pida de los expedientes de los inmigrantes y de la ley de extranjer¨ªa. Pero tanto CEAR como varios responsables pol¨ªticos,' entre ellos el delegado del Gobierno en Andaluc¨ªa, Jos¨¦ Torres Hurtado, del PP, lo que m¨¢s lamentan es que Marruecos no colabore con Espa?a en el control y sobre todo en la repatriaci¨®n de los inmigrantes ilegales.