Anguita gana el pulso a Nueva Izquierda y acepta llamar expresamente al PSOE a unirse contra el PP

Julio Anguita ech¨® ayer un ¨®rdago a Nueva Izquierda (NI) y lo gan¨®. Acept¨® pr¨¢cticamente todas sus sugerencias, incluida la de hacer un llamamiento expreso al PSOE a la unidad, y sum¨® a su informe el documento NI que hab¨ªa rechazado el Consejo. Les pidi¨®, por primera vez, que votasen con ¨¦l, pero NI interpret¨® que Anguita rechazaba lo fundamental de sus propuestas y vot¨® en contra. Las minor¨ªas mantendr¨¢n la posibilidad de defender sus tesis ante cualquier ¨®rgano de direcci¨®n. NI logr¨® frenar la operaci¨®n de aumentar el Consejo-Pol¨ªtico por cooptaci¨®n lo que romper¨ªa el actual equilibrio.

Hubo protestas, tensiones, cuestiones de orden. Enfrentamientos claros entre las dos grandes tendencias de IU -Francisco Frutos (PCE) lleg¨® a llamar a los de NI, sin nombrarles, submarinos no del PSOE, sino del PP-. Pero, al final, Julio Anguita adelant¨® el brazo, ech¨® el pulso y gan¨®. Gan¨®, curiosamente, aceptando formalmente las reivindicaciones m¨¢s significadas de Nueva Izquierda. "Si vot¨¢is que no, ser¨¢ por otras razones", les advirti¨®. Votaron que no."Voy a ir m¨¢s all¨¢ que todos vosotros", avis¨® Anguita. Y lo hizo. Si los de NI, con Diego L¨®pez Garrido a la cabeza, hab¨ªan pedido que se pusieran nombres a las fuerzas pol¨ªticas a las que se llamaba a la unidad contra la pol¨ªtica del PP, Anguita puso nombres y apellidos: Partido Socialista Obrero Espa?ol. Y si el Consejo se hab¨ªa negado a recibir un documento de NI, Anguita lo asumi¨® "corregido y aumentado. Que se incluya con mi informe".Si el problema estaba en decir que la pol¨ªtica del PP era la misma que la del PSOE, Anguita lo matiz¨®. "EL PP ha profundizado en lo malo de esa pol¨ªtica". Y acept¨® que en otros puntos hab¨ªa seguido una pol¨ªtica distinta a la de los socialistas -Cuba, ense?anza o cultura", por ejemplo-.

"Votad conmigo"

Dedic¨® a NI la totalidad de su discurso final. "No vot¨¦is que no por estas cosas. Por cuestiones sem¨¢nticas. Votad conmigo. Votad que s¨ª. Porque si no lo hac¨¦is, ser¨¢ por otras razones". Uno a uno fue diseccionando cada uno de los puntos en conflicto: el llamamiento al di¨¢logo. "Estoy dispuesto a negociar d¨®nde quieran, c¨®mo quieran y cu¨¢ndo quieran con el PSOE. En el llamamiento contra la pol¨ªtica del PP incluyamos en esa cadencia de sindicatos y fuerzas pol¨ªticas al PSOE". Y dijo m¨¢s. Dijo estar dispuesto a abrir debates sectoriales con el PSOE. No hubo modo. L¨®pez Garrido explicar¨ªa despu¨¦s que Maastricht y el empe?o de Anguita en considerar continuista las pol¨ªticas de PP y PSOE hac¨ªan imposible el voto afirmativo. Hab¨ªa empezado el Consejo con dos cuestiones previas: acabar antes del partido Inglaterra-Espa?a y con la protesta de Nueva Izquierda por haberse negado el ¨¢rea de organizaci¨®n a aceptar un documento de esta corriente. Se cumplieron ambas cuestiones.

Y, en el fondo, con el triunfo de Nueva Izquierda que no esperaba que Anguita asumiera su documento. Diego L¨®pez Garrido y Juan Berga (NI) calentaron el ambiente. Ambos defendieron la apertura de la organizaci¨®n y, sobre todo, la diferenciaci¨®n entre las pol¨ªticas del PP y las del PSOE. Pero para calentar las cosas contaron con la inestimable colaboraci¨®n de Francisco Frutos (PCE) que, en una incre¨ªble pirueta, logr¨® llegar a la conclusi¨®n de que algunos compa?eros -no mencion¨® a NI- m¨¢s cerca de las posiciones del PP que de las del PSOE.

Ya se hab¨ªa disuelto el conflicto de la participaci¨®n de las minor¨ªas en los ¨®rganos de direcci¨®n con una enmienda de Jaime Pastor. Propuso que, en vez de haber un solo ponente que llevara a los ¨®rganos superiores lo acordado en otras instancias, hubiera otros ponentes que defendieran en cualquier ¨¢mbito las posturas de las minor¨ªas. Hecho.

Hubo una cierta tensi¨®n cuando la mesa del Consejo, presidida por Pedro Granado -no estuvo muy fina la mesa-, rechaz¨® una cuesti¨®n de orden de Berga para que no se aceptara votar el ingreso en el Consejo de In¨¦s Saban¨¦s por cooptaci¨®n. Las protestas de la sala hicieron que los miembros de la mesa debatieran brevemente y terminaran aceptando dejar en suspenso esta operaci¨®n y se debatiera previamente en Presidencia federal.