La edil de Fuencarral, deja sin hormig¨®n a los obreros de la M-40

"Eran las cuatro de la madrugada y los camiones pasaban frente a las casas", relata Charo, otra afectada. "No pod¨ªamos ni escuchar la televisi¨®n porque el ruido era ensordecedor".Y a?aden: "Durante casi un a?o nadie parec¨ªa hacernos caso. Por eso tuvimos que manifestarnos pidiendo el cierre de la planta. Incluso nos presentamos en casa del alcalde [que vive a unos 300 metros de la hormigonera] para que hiciera algo. El mi¨¦rcoles pasado nos recibi¨®".

Las protestas y presiones lograron su objetivo. Beatriz Elorriaga firm¨® la clausura de la planta el jueves, al d¨ªa siguiente de la entrevista, de los vecinos con el regidor.

La edil coment¨® ayer: "El d¨ªa despu¨¦s de cerrar la industria me vinieron a ver los directivos de Dragados. Me dijeron que si les cerraba la planta no podr¨ªan terminar los trabajos de la M-40 y que s¨®lo les quedaba un mes y medio para terminar las obras. Les respond¨ª que ¨¦se no era mi problema. Que lo que ten¨ªan que hacer es tener una licencia de funcionamiento, y no la tienen".

La edil contin¨²a: "El alcalde me apoya. Me ha dicho que cumpla la ley. Y la ley dice que la planta no puede funcionar sin permiso, repito. Yo soy la concejal de Fuencarral y debo estar junto a mis vecinos. La M-40 no es mi problema. Eso es todo".

El vecindario de la calle de Gabriela Mistral se mostraba ayer encantado con el cierre. "Eso ten¨ªan que haberlo hecho mucho antes, porque la situaci¨®n era inaguantable. Desde las ventanas ve¨ªamos todo el proceso de llenado de los camiones".

Y a?aden: "Conoc¨ªamos hasta al se?or del pito. Uno que tocaba cada vez que todo estaba listo para llenar de hormig¨®n un cami¨®n en espera. Algunos vecinos, incluso, se dedicaron durante d¨ªas a seguir a los camiones. Quer¨ªan ver ad¨®nde llevaban la carga. Descubrieron que la hormigonera, adem¨¢s de suministrar el material a la M-40, era la que aportaba el hormig¨®n para las obras de la plaza de Oriente y una obra de la carretera de Extremadura", relataban ayer.

Mientras, los obreros que trabajaban en la gigantesca obra del cierre de la M-40 esperaban sin ¨¦xito. la llegada de las hormigoneras. "Est¨¢ todo medio parado porque no llega el hormig¨®n necesario para el t¨²nel y los puentes. Vienen algunos camiones de la planta de Boadilla del Monte [18.460 habitantes], pero llegan muy tarde porque est¨¢ lejos", relataban."Todo va m¨¢s lento. A lo mejor, en los pr¨®ximos d¨ªas, se arregla la situaci¨®n", a?ad¨ªan mientras oteaban el horizonte a la espera del hormig¨®n deseado.

El resto de empleados trabajaba con normalidad. Encofradores, conductores de maquinaria pesada, operadores de gr¨²as... "Los que est¨¢n fastidiados son los del t¨²nel y los puentes", relataban los obreros. "Casi no pueden hacer nada. Tienen que esperar y esperar. Imagino que pronto dar¨¢n una soluci¨®n a este problema, porque los grandes trabajos necesitan hormig¨®n. Es fundamental para los puentes y los t¨²neles. Esas cosas no se hacen con cemento", explicaban. Por su parte, Dragados no respondi¨® ayer a las llamadas de este peri¨®dico para conocer su versi¨®n de los hechos.