El Gobierno prepara una subida de impuestos especiales y un recorte de gastos sanitarios en 1997

El ajuste presupuestario que prepara el Gobierno para 1997 se cifra en 1,2 billones de pesetas. ?sta es la cantidad que v¨ªa aumento de ingresos o ahorro del gasto permitir¨¢ reducir el d¨¦ficit p¨²blico al 3% del producto interior bruto (PIB) a finales del a?o que viene y acceder a la moneda ¨²nica en el pelot¨®n de cabeza. Para cuadrar las cuentas, el Ejecutivo conservador espera conseguir unos ingresos adicionales de 400.000 millones de pesetas y reducir el gasto p¨²blico en 800.000 millones. Todo ello sin subir los impuestos fundamentales ni tocar los cap¨ªtulos m¨¢s importantes del gasto social.

Este dif¨ªcil objetivo domin¨® el intenso debate sobre presupuestos que mantuvo ayer el Consejo de Ministros. El vicepresidente segundo del Gobierno y ministro de Econom¨ªa, Rodrigo Rato, present¨® al Gabinete las cifras macroecon¨®micas en las que basa su proyecto: la econom¨ªa crecer¨¢ un 3%, los gastos no aumentar¨¢n m¨¢s del 2,6% que se espera suba la inflaci¨®n y los ingresos se incrementar¨¢n en un 3% en t¨¦rminos reales.

Recetas m¨¦dicas

Rato tambi¨¦n dio a conocer las l¨ªneas maestras del ajuste que se requiere para reducir el d¨¦ficit. Por el lado de los ingresos, el Gabinete discuti¨® la posibilidad de subir los impuestos especiales (gasolina, alcohol y tabaco), una medida que, seg¨²n c¨¢lculos de Econom¨ªa, aumentar¨ªa la recaudaci¨®n en 200.000 millones de pesetas. Otros 200.000 millones se podr¨ªan ingresar mediante la imposici¨®n de un recargo (se baraja 100 pesetas) en las recetas m¨¦dicas, una medida que adem¨¢s tendr¨ªa un efecto desincentivador en el consumo de medicamentos y, por tanto, supondr¨ªa un ahorro en el gasto sanitario. No obstante, esta propuesta no cuenta con el respaldo de todos los miembros del Gabinete, pues temen que sea fuertemente rechazada por la opini¨®n p¨²blica.Antes de recurrir a esta f¨®rmula y siempre con la idea de moderar los gastos sanitarios, el Gobierno agotar¨¢ la v¨ªa de negociar con Farmaindustria, la patronal del sector, una reducci¨®n del gasto en medicamentos. Tambi¨¦n se intentar¨¢ llegar a un acuerdo con los m¨¦dicos de la Seguridad Social para que receten f¨¢rmacos m¨¢s baratos.

En el frente de los ingresos, el Consejo descart¨® la propuesta de Converg¨¨ncia i Uni¨® de extender a toda Espa?a el canon sobre el agua que paga Catalu?a como v¨ªa para aumentar los ingresos y evitar recortes en los gastos sociales y las inversiones p¨²blicas.

El secretario de Estado de Comunicaci¨®n, Miguel ?ngel Rodr¨ªguez, asegur¨® en la conferencia de prensa posterior que el Ejecutivo no "busca conseguir m¨¢s ingresos con nuevos m¨¦todos", en referencia no s¨®lo a la subida del agua sino tambi¨¦n al cobro de peajes en futuras autov¨ªas. Tambi¨¦n se analiz¨® y qued¨® pr¨¢cticamente descartada la aplicaci¨®n de una vi?eta en los autom¨®viles como v¨ªa para financiar las infraestructuras.

El reparto del recorte del gasto en 800.000 millones qued¨® menos definido en el consejo, donde volvi¨® a quedar claro que s¨®lo las pensiones se salvar¨¢n del ajuste. 250.000 millones se pueden ahorrar si el empleo crece el 2,1% previsto por Econom¨ªa. Este ahorro se derivar¨ªa del menor gasto en prestaciones por desempleo, de una parte, y en la mayor recaudaci¨®n por cotizaciones a la Seguridad Social al incrementarse el n¨²mero de ocupados, de otra.

El Ejecutivo conservador pretende ahorrarse otros 200.000 millones en las aportaciones a las empresas p¨²blicas. Esta medida fue muy discutida en la reuni¨®n de ayer por su repercusi¨®n social. En este sentido, el plan de privatizaciones del Gobierno, que prev¨¦ la venta de las empresas m¨¢s rentables, no supondr¨ªa ning¨²n ahorro en esta partida. De los cerca de 600.000 millones de pesetas que se prev¨¦n ingresar con las privatizaciones el a?o que viene, 300.000 se destinar¨¢n a amortizar los intereses de la deuda p¨²blica. Los restantes 300.000 servir¨ªan para co-financiar un fondo mixto-de capital p¨²blico y privado- destinado a invertir en infraestructuras. Esta f¨®rmula permitir¨ªa mantener la inversi¨®n en obras p¨²blicas en 1997.

Los gastos de la Administraci¨®n tambi¨¦n se reducir¨¢n. Rodrigo Rato propuso un recorte del 10% en los gastos corrientes de los ministerios. S¨®lo la Casa Real y las Cortes, cuyo presupuesto se congelar¨¢, se salvan de este ajuste. Tampoco quedar¨¢n al margen del recorte los funcionarios, cuyos sueldos se pretende congelar.

El Gobierno conf¨ªa en que estas medidas permitan cumplir el objetivo de d¨¦ficit que exige Maastricht o acercarse lo m¨¢ximo posible. Las dificultades para conseguirlo las comparten otros pa¨ªses europeos, como Francia. La esperanza que comparten muchos gobiernos es que en el examen, a mediados de 1998, se tenga en cuenta la tendencia en la reducci¨®n del d¨¦ficit m¨¢s que el cumplimiento estricto del 3% del PIB, algo que, por otra parte, contempla el propio Tratado de Maastricht.