"La recusaci¨®n no debe resolverla el juez de al lado, sino un tribunal superior"

El magistrado Jos¨¦ Antonio Alonso, leon¨¦s de 36 a?os, portavoz de Jueces para la Democracia, asociaci¨®n judicial progresista y minoritaria, hace un par¨¦ntesis en sus vacaciones y opina sobre la decisi¨®n del nuevo Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) en torno, al pol¨¦mico regreso a la jurisdicci¨®n de los jueces que han desempe?ado funciones pol¨ªticas. Alonso reclama "normalidad" para el ejercicio de la pol¨ªtica. y cree que la mejor garant¨ªa de imparcialidad es "una causa tajante de abstenci¨®n y recusaci¨®n" y que la recusaci¨®n la resuelva "no el juez de al lado, sino un tribunal superior".Pregunta. ?Cu¨¢l es la regulaci¨®n adecuada para el regreso de los jueces que han' ejercido cargos pol¨ªticos?

Respuesta. Lo primero es analizar si existe colisi¨®n objetiva de intereses durante la etapa pol¨ªtica y la judicial. Para apreciar si se produce esa colisi¨®n, lo mejor es establecer una causa tajante de abstenci¨®n y recusaci¨®n que deje el menor margen posible a la interpretaci¨®n.

P. Pero la recusaci¨®n la resuelve el juez pr¨®ximo. La recusaci¨®n de Garz¨®n la resuelve G¨®mez de Lia?o, por ejemplo.

R. Hay que reformar la ley org¨¢nica del Poder Judicial para que la recusaci¨®n no la resuelva el juez de al lado, sino un tribunal superior, que debe hacer esa m¨ªnima interpretaci¨®n.

P. Todo empez¨® con el regreso de Garz¨®n a la Audiencia Nacional.

R. Cuando Garz¨®n regres¨® no exist¨ªa una causa de abstenci¨®n y recusaci¨®n objetiva como la que ahora se propone y ha sido dif¨ªcil demostrar la enemistad subjetiva alegada.

P. ?Qu¨¦ opina de las otras soluciones que se barajan?

R. Me pregunto qu¨¦ imparcialidad pueden proporcionar los tres a?os de excedencia forzosa propuestos por Justicia. En cuanto a la soluci¨®n del CGPJ, el regreso a un destino distinto al anterior, puede ser una estupidez si la funci¨®n judicial no tiene nada que ver con la funci¨®n pol¨ªtica desempe?ada. La soluci¨®n es esa causa espec¨ªfica de abstenci¨®n o recusaci¨®n para el caso concreto.

P. Hay quienes no descartan que los jueces pol¨ªticos abandonen para siempre la judicatura.

R. Nosotros siempre hemos partido de que los jueces son ciudadanos y de que en un sistema democr¨¢tico hay que tener mucho cuidado en no transformar la situaci¨®n de una persona en la de un juez sobrehumano que, desde su torre de marfil, est¨¦ por encima de la realidad social y de los dem¨¢s ciudadanos. Reivindicamos la normalidad del juez, como ciudadano que resuelve conflictos por encargo constitucional, no por mandato divino.

P. Entonces, ?la pol¨ªtica no contamina a los jueces?

R. En absoluto. Quienes abogan por ese juez metaf¨ªsico son luego los m¨¢s interesados en mantener posiciones pol¨ªticas puras y duras. No hay que desconfiar de poderes democr¨¢ticos que se ejercen con luz y taqu¨ªgrafos. ?Por qu¨¦ se desconf¨ªa de poderes constitucionales y no de otros poderes econ¨®micos o sociales, que vinculan con multinacionales, por ejemplo?