Goleando en casa

Joaqu¨ªn Sabina y Los Rodr¨ªguez

Plaza de toros de Las Ventas. 2.500 pesetas. Mi¨¦rcoles 4 de septiembre.

Dicen los futboleros que, para ver un buen gol o una gran jugada hay que verse ya muchos partidos. Tambi¨¦n dicen que jugar en casa es medio partido ganado. Usando de s¨ªmiles balomp¨¦dicos, poco esfuerzo ten¨ªan que hacer estos dos equipos para marcar una y otra vez en la c¨¢lida porter¨ªa de un p¨²blico entregado. Pese a que la lluvia estuvo a punto de anegar la cancha, la afici¨®n acudi¨® en masa a disfrutar de la presentaci¨®n de estos dos artistas de gala.El tel¨®n fue levantado de manera elegante por unos Rodr¨ªguez que estallan de puro maduros. Sobriedad y gusto en la ejecuci¨®n de unos temas que ya se han colado por derecho en la memoria del p¨²blico espa?ol. Todo funcion¨® al magn¨ªfico nivel al que la banda tiene acostumbrado, aunque quiz¨¢ pecaran de previsibles. Previsible, ¨¦sa podr¨ªa ser una de las palabras para definir la noche.

Los temas del grupo fueron coreados todos de forma un¨¢nime, aunque merecer¨ªa la pena resaltar la canci¨®n Aqu¨ª no podemos hacerlo, himno antiprohibicionista con vocaci¨®n de saltar de una vez el muro de lo pol¨ªticamente correcto. Incluso, Sabina se anticip¨® a s¨ª mismo acompa?ando a la banda en el tema Todav¨ªa una canci¨®n de amor, como, queriendo dejar sentado que el colegueo es a¨²n moneda de curso legal.

"Gracias a Madrid por ser estaci¨®n de tr¨¢nsito para aves de paso". Esta frase fue la llave que utiliz¨® Joaqu¨ªn Sabina, rodeado en el escenario de pura imaginer¨ªa escolar de los a?os cincuenta, para abrir la ya absolutamente entregada defensa del respetable. Con una banda de lo mejorcito del panorama espa?ol apoy¨¢ndole, Joaqu¨ªn dio rienda suelta a la ceremonia anual de reencuentro con los que le han acompa?ado desde el principio y tambi¨¦n con ¨¦sos que, cada temporada, se van subiendo al carro. El compositor y cantante entr¨® a saco con las canciones de su ¨²ltimo elep¨¦, Yo, mi, me, contigo. A su nivel, asimismo, atac¨® cl¨¢sicos de ¨¦sos que todo el mundo esperaba, y la velada transcurri¨®, como se suele decir, sin ning¨²n sobresalto rese?able.

S¨®lo la alternativa como cantante a los miembros de su grupo y la presencia -invitaci¨®n de vuelta- de Andr¨¦s Calamaro y Ariel Rot para intervenir enCon la frente marchita y Princesa introdujeron alguna novedad rese?able.

Ni qu¨¦ decir tiene que el partido acab¨® con goleada de Sabina y Los Rodr¨ªguez. ?Podr¨ªa ser de otro modo?