Unas gotas de emoci¨®n

Si no sale el buen novillo de Guardiola con el que Juan Manuel Ben¨ªtez dibuj¨® unos bellos muletazos, el asunto hubiera sido m¨¢s que grave. Pero ese momento de emoci¨®n no deja de ser una gota en un oc¨¦ano de aburrimiento.La afici¨®n ya no sabe qu¨¦ hacer: si abandonar definitivamente y dedicar su vida al golf o tirarse al r¨ªo. Hay quien piensa que ser¨ªa mejor lo segundo, m¨¢s barato y expeditivo.

Lo cierto es que la afici¨®n pasa un momento de grave atribulaci¨®n. Desert¨® de la novillada y se dirigi¨® en masa a disfrutar con un remodelado Sevilla FC. Pues pinch¨® el equipo y muchos quisieron tirarse al Guadalquivir para olvidar sus penas. Como la afici¨®n se fue al f¨²tbol, en la Maestranza s¨®lo hab¨ªa unos pocos extranjeros que aguantaron estoicos algunos de los momentos m¨¢s aburridos del a?o.

Cinco novillos salieron que derrocharon mansedumbre y brusquedad. S¨®lo el sexto, de Guardiola, embisti¨® con franqu¨ªa y permiti¨® que Juan Manuel Ben¨ªtez lo aprovechara con gusto y torer¨ªa. Lo recibi¨® con ajustadas ver¨®nicas y dibuj¨® tandas de derechazos y naturales con armon¨ªa exquisita. El novillo era excelente, pero el novillero estuvo a la altura de su oponente.

Es una pena que no redondeara la buena faena a la hora de matar, pero el presidente compens¨® el error con las dos orejas y la vuelta al ruedo del novillo; ambas decisiones, exageradas.

Alberto Manuel s¨®lo pudo demostrar valent¨ªa y dominio de la t¨¦cnica. Ni?o de Leo estuvo voluntarioso con los novillos m¨¢s mansos..