Necesitan una guerra
Cuando de nuevo vuelven a o¨ªrse los ruidos del sucio negocio de la guerra (en este caso por razones dictatoriales el uno y electorales el otro) me acuerdo de esos h¨¦roes an¨®nimos que, defendiendo la limpia causa de la paz, han conseguido un ¨¦xito relevante en nuestro pa¨ªs.Espa?a, el pa¨ªs europeo de mayor empleo en precario, y por tanto el de mayor ¨ªndice en accidentes laborales, ostenta tambi¨¦n otro r¨¦cord: el de mayor n¨²mero de caballeros pacifistas e insumisos. Estos se?ores de la paz, y por tanto ingratos para los se?ores de la guerra, han sido bombardeados con operaciones de castigo cada vez que han tenido la osad¨ªa de asomar la bandera blanca.
A la mayor¨ªa de los semianalfabetos que compon¨ªan el grueso de los ej¨¦rcitos hist¨®ricos, era f¨¢cil embaucarlos con discursos patrioteros, pero a estos j¨®venes inteligentes nacidos en la era nuclear no se les puede decir que "el hombre mata siempre con piedras o con lo que sea", porque ellos saben muy bien que no es lo mismo un palo que una bomba at¨®mica.
Adem¨¢s, est¨¢n convencidos de que los grandes grupos financieros de la industria de la guerra necesitan que ¨¦sta no pare, y para eso cuentan con los usuarios o destructores de sus m¨¢quinas, los ej¨¦rcitos; ¨¦stos forman parte de los bien llamados poderes f¨¢cticos, que desde luego no llevan en sus programas electorales ninguna soluci¨®n seria para los problemas sociales del Tercer y Cuarto Mundo.
Unas veces por intereses creados de ¨ªndole dictatorial, y los m¨¢s por intereses econ¨®micos y monopolizadores, como la hist¨®rica guerra del opio en China, o la ¨²ltima del petr¨®leo en el golfo P¨¦rsico, necesitan siempre lo mismo: una guerra. As¨ª ha pasado entre reinos en el devenir hist¨®rico... y as¨ª no se puede seguir.
S¨®lo la historia aclarar¨¢ el c¨®mo, el porqu¨¦ y qui¨¦n desencaden¨® el enigm¨¢tico conflicto yugoslavo despu¨¦s de tantos a?os de paz. Pero acostumbran a finalizarlos los mismos que los inician y cuando a ellos les interesa... Los verdaderos h¨¦roes han sido los pacifistas e insumisos serbios, bosnios y croatas, que, unidos en fraternal abrazo, prefirieron ser castigados y desertar antes que matarse entre hermanos.-
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