Aznar advierte que elGobierno no puede convertirse en un tribunal ni los, jueces en gobernantes
Jos¨¦ Mar¨ªa Aznar busc¨® ayer ansiosamente la comprensi¨®n de sus votantes tras no haber desclasificado los papeles del Cesid sobre los GAL. A los 10.000 simpat¨ªzantes movil¨ªzados para arroparle en el Palacio de los Deportes de Madrid, que no llenaron el recinto, les explic¨® que regenerar la vida pol¨ªtica "no es hacer un ajuste de cuentas con el pasado, como si esto fuera una pel¨ªcula del Oeste". Y a quienes le han presionado desde la sociedad les replic¨® que "no se puede convertir a la justicia en el Gobierno, ni al Gobierno en un tribunal de justicia, ni al Parlament¨® en algo inservible para la vida democr¨¢tica".
Fue un mitin con aspectos festivos -banderolas, acompa?amiento musical, lemas jocosos (" Hay-Rodrigo-para-Rato ")pero no fue propiamente una fiesta. Fue una importante concentraci¨®n de simpatizantes del PP. Pero los casi 10.000 asistentes no llenaron el Palacio de Deportes: unos 500 asientos quedaron vac¨ªos. Y en la calle, la pantalla de televisi¨®n y las vallas de contenci¨®n resultaron innecesarias. Hace seis meses sirvieron para responder al entusiasmo de 15.000 personas aglomeradas al aire libre porque no hab¨ªan cabido dentro del recinto.Preocupaci¨®n
El discurso de Aznar fue el de un gobernante preocupado por la frustraci¨®n que ha creado en una parte del electorado del PP la cautela del Gobierno ante el caso GAL. Quiz¨¢ un sector al que adul¨® los o¨ªdos el propio PP cuando ejerc¨ªa la oposici¨®n.
Tambi¨¦n hubo en su discurso un esforzado deseo de transmitir "sereno optimismo", y una acreditaci¨®n de firmeza. "Este es un Gobierno honrado, que defiende exclusivamente ' el inter¨¦s general y que ni ahora ni nunca, por mucho que empujen, va a sucumbir a defender un inter¨¦s particular" dijo. La constataci¨®n, tambi¨¦n, de que las presiones se han producido qued¨® impl¨ªcita. Pero eludi¨® concretarla.
En otro pasaje de su intervenci¨®n subray¨®, elevando la voz que "no se puede convertir al Gobierno en un tribunal de juticia, ni a la justicia en Gobierno". Quiz¨¢ la m¨¢s en¨¦rgica declaraci¨®n que ha hecho respecto a la no desclasificaci¨®n de los documentos del Cesid sobre los GAL, aunque no los citara. Y apoy¨® vehementemente, sin citarle tampoco al ministro de Defensa Eduardo Serra. "Asumo la responsabilidad de todas las actuaciones del Gobierno, las buenas y las malas", dijo.
Aznar dej¨® traslucir su preocupaci¨®n por hacer comprender que la decisi¨®n sobre los papeles del Cesid y otras relacionadas con los pactos firmados con CiU y PNV no han supuesto ninguna renuncia a ideas, principios y ambiciones, aunque evit¨® cuidadosamente citar las propuestas electorales. El l¨ªder del PP interpret¨® los diez millones de votos que recibi¨® el pasado d¨ªa 3 de marzo como un aval para ejercitar a fondo el di¨¢logo y el entendimiento. De este modo arropaba los pactos con los nacionalistas, cuya dif¨ªcil digesti¨®n quedaba tambi¨¦n patente.
El jefe del Ejecutivo relat¨® exhaustivamente las objeciones y los obst¨¢culos puestos a su victoria electoral -"se me presentaba como un d¨®berman que iba a pasar a colmillo a la mitad de los espa?oles"- para realzar, sobre ese fondo, lo que el Gobierno ha hecho en estos cuatro meses. Un Ejecutivo que, seg¨²n explic¨®, entra?a en s¨ª mismo un avance en la regeneraci¨®n de la vida p¨²blica porque en su seno nadie est¨¢ procesado por apropiarse dinero de los fondos reservados, ni est¨¢ lastrado por esc¨¢ndalos como el de Filesa. Un Gobierno, agreg¨®, que va a llevar dentro de pocos d¨ªas al Parlamento un Presupuesto del Estado "muy importante, muy dif¨ªcil, pero decisivo para la econom¨ªa espa?ola".
Aznar mencion¨® que esos Presupuestos y el cumplimiento de los requisitos para ingresar en la uni¨®n econ¨®mica y monetaria va a requerir esfuerzos que no concret¨®. Solamente indic¨® que al primero que se los pedir¨¢ ser¨¢ al PP, y reconoci¨® p¨²blicamente que la congelaci¨®n del sueldo de los funcionarios es una medida tan dolorosa como necesaria. Pero no hizo alusi¨®n ninguna de las pol¨¦micas medidas aireadas y barajadas por el Gobierno respecto a los problemas de la sanidad, el gasto farmac¨¦utico o la financiaci¨®n de nuevas infraestructuras, por citar tres ejemplos.
Antes de que comenzara de nuevo, a modo de fin de fiesta, el ondear de las banderolas con las siglas, del PP, se remont¨® a la crisis del 98 para asegurar que Espa?a superar¨¢ aqu¨¦l s¨ªndrome de inseguridad en s¨ª misma y cit¨® a Salvador de Madariaga. "Un Estado sin centro es como una nave sin proa".
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