El FMI pide a los pa¨ªses industrializados que no bajen la guardia en la lucha contra la inflaci¨®n
ENVIADA ESPECIALLa inflaci¨®n de los pa¨ªses industrializados est¨¢ en tasas hist¨®ricamente bajas -2,4%- y las perspectivas de crecimiento de sus econom¨ªas para 1997 son las mejores de los ¨²ltimos a?os. Pero este halag¨¹e?o horizonte no debe provocar una relajaci¨®n en la lucha contra la inflaci¨®n, seg¨²n advirti¨® el m¨¢ximo ¨®rgano ejecutivo del Fondo Monetario Internacional, el comit¨¦ interino, tras su reuni¨®n de anteayer. El comit¨¦ respald¨¦ los esfuerzos de consolidaci¨®n fiscal aplicados por los gobiernos europeos para alcanzar la uni¨®n monetaria.
Hay varias razones que sustentan las optimistas previsiones del comit¨¦ interino del Fondo: el mayor equilibrio de los tipos de cambio, la reducci¨®n de los d¨¦ficit fiscales, el mayor crecimiento del comercio y el buen resultado de la lucha contra la inflaci¨®n. Sin embargo, la reciente decisi¨®n de la Reserva Federal, banco central estadounidense, de no subir sus tipos de inter¨¦s pese a los s¨ªntomas de fortaleza de la econom¨ªa ha provocado inquietud entre las autoridades financieras que participan en las reuniones del Fondo y el Banco Mundial."Las autoridades monetarias deben de estar alertas por si hace falta anticiparse a cualquier presi¨®n inflacionista", declar¨® el director gerente del FMI, Michel Camdessus, en una conferencia de prensa posterior a la reuni¨®n del comit¨¦ interino.. "No hay que ser complacientes con respecto a la inflaci¨®n ahora que est¨¢ bajo control", advirti¨®.
El ministro alem¨¢n de Finanzas, Theo Waigel, comparte la opini¨®n de Camdessus: "Aunque la inflaci¨®n est¨¦ controlada en los pa¨ªses industrializados, no debemos concluir que la pol¨ªtica monetaria puede relajarse y ser utilizada para otros fines", declar¨® ante el comit¨¦. En la mayor¨ªa de Europa, los tipos de inter¨¦s a corto plazo han bajado de forma imparable, pero las autoridades monetarias soportan una fuerte presi¨®n para reducirlos a¨²n m¨¢s y compensar el efecto depresor que est¨¢ teniendo en la actividad econ¨®mica los recortes fiscales.
Unos recortes fiscales que, por otra parte, han ayudado a dar credibilidad al proyecto de uni¨®n monetaria (UEM). Los rigurosos presupuestos para 1997 presentados estos d¨ªas por Espa?a e Italia con el objetivo de participar con el grupo de cabeza en la constituci¨®n del euro han dado rienda suelta a la especulaci¨®n sobre cu¨¢ntos pa¨ªses formar¨¢n la uni¨®n monetaria. A diferencia de pasadas reuniones, la UEM se considera un hecho. la esperada recuperaci¨®n del crecimiento en la UE -el PIB aumentar¨¢ un 1,6% este a?o y un 2,5% el que viene, seg¨²n el FMI-, facilitar¨¢ el camino. El comisario europeo de Asuntos Econ¨®micos, Yves-Thilbaut de Silguy, evit¨® pronunciarse sobre las posibilidades de Espa?a de estar en el grupo de cabeza, pero s¨ª asegur¨® que los duros ajustes en marcha permitir¨¢n que la UEM est¨¦ formada por un n¨²mero de pa¨ªses mayor de los siete u ocho que esperaba hasta ahora la Comisi¨®n.
El mejor s¨ªntoma de la credibilidad que est¨¢ ganando el proyecto de uni¨®n monetaria europea es el repentino inter¨¦s mostrado por los socios comerciales europeos, sobre todo de Estados Unidos, en el impacto que tendr¨¢ el euro en los mercados. "Quieren saber si una vez que el marco desaparezca, el euro ser¨¢ capaz de tener la misma credibilidad que el marco", se?al¨® a un grupo de periodistas el presidente del Bundesbank, Hans Tietmeyer. "De no ser as¨ª, se puede producir una huida masiva del capital hacia el d¨®lar con fuertes consecuencias en los mercados de cambio", a?adi¨®, "nadie quiere que eso ocurra".
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