Los sandinistas intentan quitar legitimidad al triunfo de Alem¨¢n en Nicaragua
A medida en que el recuento oficial consolida el triunfo del derechista Arnoldo Alem¨¢n en las elecciones presidenciales de Nicaragua, su principal opositor, el Frente Sandinista, despliega una intensa campa?a para tratar de restar legitimidad al futuro mandatario. Despu¨¦s de que su candidato, Daniel Ortega, decidiera desconocer los resultados provisionales, los medios de comunicaci¨®n del partido empiezan a exigir la repetici¨®n de unos comicios avalados por los observadores internacionales.
Con las tres cuartas partes de las mesas escrutadas, la Alianza Liberal supera el 48% de los votos, seguida del Frente Sandinista, con el 38%. Si bien los resultados no pueden ser m¨¢s contundentes, los fallos organizativos constituyen un estupendo r¨ªo revuelto en donde los perdedores pretenden pescar algo, ya sea una segunda vuelta, en el caso sandinista, o bien, en el caso de los partidos m¨¢s peque?os, un esca?o que les evite desaparecer del mapa pol¨ªtico.A tres d¨ªas de las elecciones generales, las espadas est¨¢n en alto. Al anuncio de Daniel Ortega de ignorar los resultados provisionales hasta que no se cuenten los votos acta por acta, ha seguido un clima de descalificaci¨®n global de los comicios alimentado por los medios de comunicaci¨®n y ciertos cuadros del Frente Sandinista. El objetivo ser¨ªa, en primer t¨¦rmino, forzar una segunda vuelta. Y, en ¨²ltima instancia, repetir con el nuevo presidente el esquema empleado con su antecesora, Violeta Barrios de Chamorro: un pacto para preservar las esferas de poder pol¨ªtico y econ¨®mico.
Oposici¨®n frontal
"Alem¨¢n ha sido elegido por uno de cada dos nicarag¨¹enses, luego la mayor¨ªa del pa¨ªs apoya a otros partidos", explica con extra?a l¨®gica un periodista del Canal 4 de televisi¨®n. ''Si se acorrala al Frente, tendr¨¢ que hacer una oposici¨®n frontal al partido que tome el poder en condiciones dudosas. ?Hay que celebrar otra elecci¨®n!". Y empieza un carrusel de im¨¢genes de incidentes en estos d¨ªas y de testimonios de ciudadanos aterrorizados porque Alem¨¢n les va a quitar sus escasas pertenencias. El periodista pide calma a la poblaci¨®n, y vuelta a empezar.Con semejantes mensajes tranquilizadores la polic¨ªa ha optado por no autorizar manifestaciones y ha prorrogado la suspensi¨®n de los permisos de armas. Violeta Chamorro ha pedido, en un mensaje televisado, mantener "la tranquilidad y la cordura", y "tener confianza en los resultados". "Todos lo observadores nacionales y extranjeros", record¨®, "han reconocido la validez del proceso".
Esas opiniones le resbalan a Guillermo Osorno, el pastor evang¨¦lico que al grito de "?Vot¨¢ 2 [su n¨²mero en la papeleta electoral], vot¨¢ por Dios!" ha convertido a su partido, el Camino Cristiano Nicarag¨¹ense, en la tercera fuerza pol¨ªtica nacional. El 5% conseguido hasta el momento le parece poco: tuvo una revelaci¨®n sagrada que le anunci¨® que ¨¦l iba a ganar, o al menos a empatar con los grandes. Y como no ha sido as¨ª, las elecciones deben repetirse.
El otro frente lo han abierto 7 de los 15 peque?os partidos condenados a desaparecer, al haberse quedado muy por debajo del 1% de los votos. Estas formaciones, antiguas integrantes de la Uni¨®n Nacional Opositora (UNO), que derrot¨® al Frente Sandinista en 1990, han exigido tambi¨¦n el recuento de la votaci¨®n acta por acta, ya que los resultados preliminares "son inconsistentes con la realidad": han tenido, dicen, menos votos que candidatos.
Ah¨ª est¨¢n personajes preeminentes en la d¨¦cada pasada, como Virgilio Godoy o Alfredo C¨¦sar. "Hemos hecho tanto por Nicaragua que es imposible que el pueblo nos d¨¦ la espalda", dec¨ªa Gustavo Tablada, l¨ªder del min¨²sculo Partido Socialista. Ninguno discute el triunfo de Arnoldo Alem¨¢n, pero s¨ª piden la revisi¨®n de incontables alcald¨ªas y esca?os.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.