Curro en el recuerdo

En este Festival homenaje al subalterno Curro Valencia, que muri¨® en el albero valenciano la pasada feria de julio, estaba anunciado Anto?ete pero a ¨²ltima hora present¨® certificado m¨¦dico. En su lugar actu¨® el diestro valenciano V¨ªctor Manuel Bl¨¢zquez. Del festejo, en lo art¨ªstico poco hay que destacar, salvo la voluntad y el gesto de los toreros. En lo econ¨®mico la recaudaci¨®n rondar¨¢ a los 20 millones de pesetas, antes de impuestos, con ayuda de Canal-9 y Canal Sur que transmitieron el festejo.La tarde se inici¨® con un emotivo acto en el que se entreg¨® una placa conmemorativa a los tres hijos del infortunado Curro Valencia, tras el que son¨®, el pasodoble Nerva en reconocimiento a la importancia de un torero. Se hizo un emotivo minuto de silencio que rompi¨® una ovaci¨®n de gala.

Abri¨® plaza un jovenc¨ªsimo rejoneador, Andy Cartagena, sobrino del desaparecido Gin¨¦s Cartagena, que estuvo h¨¢bil en la monta y efectivo en las suertes.

El ganado estuvo por debajo de sus lidiadores. Palomo Linares dio media de libro y dos bellas tandas con la derecha. Al natural el bicho se qued¨® corto, el de Linares no se quiso quedar largo, mat¨® breve y le vali¨® una oreja.

D¨¢maso Gonz¨¢lez se quer¨ªa comer con patatas, all¨ª mismo, al novillo noblote que le toc¨® en suerte. Ni?o de la Capea se las ten¨ªa que ver con un coloradito que result¨® el garbanzo negro del encierro. Y eso porque sab¨ªa lat¨ªn. Su matador se perfil¨®, hizo un volapi¨¦ y le meti¨® al garbancito una estocada en la cruz.

Juan Carlos Vera, matador con el que iba de subalterno Curro Valencia, se llev¨® una oreja y la satisfacci¨®n de saber que sus esfuerzos para que el festival fueron un ¨¦xito no fueron bald¨ªos. Tore¨® con gusto. Con unas manoletinas arranc¨® los pocos ol¨¦s de la tarde. V¨ªctor Manuel Bl¨¢zquez se encontr¨® al respetable con ganas de aplaudir. El torero de la tierra, siempre bullidor, se luci¨® con los rehiletes. Tambi¨¦n gust¨® al personal que brindara al cielo y matara r¨¢pido a un novillote que se defend¨ªa. Se fue sin una oreja. Y el p¨²blico con las manos calientes de la ovaci¨®n con la que despidi¨® a los toreros que hab¨ªan homenajeado a un amigo, a un torero, a un buen hombre que muri¨® all¨ª mismo.