Borges y los peri¨®dicos

En Un gracias a los lectores (EL PA?S, 27 de octubre, p¨¢gina 16), Juan Arias citaba una observaci¨®n de Borges sobre peri¨®dicos (y no sobre periodistas ?tranquilizaos!) que luego interpretaba: el mensaje irreverente de Borges "era simb¨®lico, como su prosa y su poes¨ªa. Lo que probablemente quiso decir en este caso fue algo corno...". M¨¢s all¨¢ de la teor¨ªa de Arias sobre el car¨¢cter simb¨®lico de la obra de Borges es de destacarlo menguada que resulta la provocaci¨®n de Borges a los peri¨®dicos en la traducci¨®n que nos ofreci¨® nuestro ex defensor. M¨¢s all¨¢ tambi¨¦n del remanido truco de convertir en s¨ªmbolo de edulcorados mensajes todo aquello cuya aspereza interpela nuestras anestesiadas sensibilidades, quiz¨¢ no sin herirnos el peque?o orgullo, m¨¢s all¨¢ de todo esto, si Borges hubiera querido decir algo as¨ª ?acaso Borges no lo hubiera dicho? Pero si lo que dijo es feo para un periodista ?por qu¨¦ entonces no olvidarlo o esconderlo ... ? Pero no, hay que traducir sus iron¨ªas en blancas consejas de abuelo de periodista novel. Confirmaci¨®n ir¨®nica, pues, de los dardos borgianos.