Absuelto un chino acusado de 'esclavizar' a sus compatriotas

La madrugada del 6 de abril de 1995, Xiaofeng Yang, a la saz¨®n de 37 a?os, y su esposa, Shulian X., de 35, se convirtieron en personajes de pesadilla. Ambos hab¨ªan sido detenidos por la Brigada Provincial de Documentaci¨®n en su taller de confecci¨®n "clandestino" de la calle del Monte Perdido, 84 (Vallecas), bajo la acusaci¨®n de "esclavizar" a dos compatriotas y de ser los "m¨¢ximos responsables" de una red de inmigraci¨®n ilegal. Aquel d¨ªa, el nombre del matrimonio oriental entr¨® en los archivos policiales. Ahora ha salido de ellos. El Juzgado de lo Penal n¨²mero 24 de Madrid ha absuelto a Xiafeng Yang de la ¨²nica acusaci¨®n que finalmente se le hizo: un delito contra la libertad y seguridad, en el trabajo (cuatro meses de arresto). La juez Gema Ortega Arencibia considera que el local de Xiaofeng cumpl¨ªa los requisitos legales. Se hab¨ªa dado de alta en el impuesto de actividades econ¨®micas cinco d¨ªas antes de la irrupci¨®n de la polic¨ªa, y hab¨ªa solicitado las pertinentes licencias. Todo en regla.Tampoco estim¨® la juez que los dos chinos descubiertos en el taller fuesen v¨ªctimas de esclavitud, ni acept¨® que estuviesen trabajando ilegalmente o que hubiesen sido tra¨ªdos a Espa?a por la Mafia. Y en contra de lo mantenido por la polic¨ªa, que declar¨® que al vigilar el local se percib¨ªa el movimiento de personas de raza oriental y se o¨ªa el ruido de las m¨¢quinas de coser, la magistrada advierte que cuando los agentes irrumpieron en el taller s¨®lo encontraron a la Mujer cosiendo -hecho no delictivo- y al marido colgando ropa. Los otros chinos permanec¨ªan inactivos. Ni se les obligaba a trabajar 16 horas seguidas ni viv¨ªan en condiciones infrahumanas.