Lia?o deja en libertad al teniente B¨¢rez, pero le obliga a acudir diariamente al juzgado

El juez Javier G¨®mez de Lia?o dej¨® ayer en libertad sin fianza al teniente de la Guardia Civil Lorenzo B¨¢rez, al que previamente hab¨ªa tomado declaraci¨®n como imputado en relaci¨®n con el apaleamiento que sufri¨® el pasado 8 de noviembre el testigo protegido 1964 / S del caso Lasa-Zabala. El juez, que ha citado de nuevo a B¨¢rez para el lunes, le ha impuesto, a petici¨®n del fiscal, la obligaci¨®n de comparecer a diario en el juzgado y no salir de Espa?a. El magistrado le mantiene como imputado por un delito de obstrucci¨®n a la justicia en concurso con secuestro, torturas, lesiones y agresi¨®n sexual.

El oficial de la Guardia Civil, detenido por orden del juez en Guatemala, donde est¨¢ destinado, declar¨® durante cuatro horas asistido por el letrado de oficio Carlos Cabezas Garc¨ªa, debido a que el juez hab¨ªa ordenado su incomunicaci¨®n.Por ello, el agente no pudo comunicarse con su abogado, Jorge Argote -procesado por encubrimiento en el caso Lasa-Zabala-, aunque tras la declaraci¨®n el juez levant¨® la incomunicaci¨®n. B¨¢rez se hab¨ªa repuesto ya de la indisposici¨®n sufrida tras el viaje desde Guatemala que hab¨ªa impedido que declarase el viernes.

La declaraci¨®n del teniente Lorenzo B¨¢rez ante el juez no ha trascendido. El sumario est¨¢ declarado secreto. S¨ª se conoce que el guardia civil neg¨® ante el juez haber inducido o haber tenido cualquier relaci¨®n con el secuestro, tortura y violaci¨®n sufridos por el testigo 1964 /S en San Fernando (C¨¢diz) el pasado 8 de noviembre.

La agresi¨®n se produjo dos d¨ªas despu¨¦s de que el testigo protegido hubiera mantenido un careo con B¨¢rez en el juzgado de G¨®mez de Lia?o, a prop¨®sito de diversas implicaciones en el caso que investiga el secuestro y asesinato de los presuntos etarras Jos¨¦ Antonio Lasa y Jos¨¦ Ignacio Zabala.

El oficial, que presta servicios en la embajada espa?ola como coordinador de seguridad, estuvo destinado en Intxaurrondo (San Sebasti¨¢n) en los a?os en los que el ahora general Enrique Rodr¨ªguez Galindo, tambi¨¦n procesado por el caso Lasa-Zabala, era su m¨¢ximo responsable.

El pasado lunes, d¨ªa 11, cuando se conoci¨® la agresi¨®n al testigo protegido, B¨¢rez, en declaraciones a la Cadena Cope expres¨® sus dudas sobre la veracidad del secuestro y torturas. "Probablemente", dijo, "ya tuvieran todo preparado desde hace tiempo. Por dinero, cualquier cosa".

El oficial, desde Guatemala, afirm¨® que ve¨ªa cosas raras en aquella historia, puesto que seg¨²n su experiencia, es muy raro que en una agresi¨®n de ese tipo la v¨ªctima no salga "con la nariz partida y la boca rota", y en este caso no aparec¨ªa eso.

El testigo agredido ha sido objeto de tres reconocimientos m¨¦dicos en los que constan las lesiones: quemaduras de primer y segundo grado, as¨ª como desgarro perineal. El primero fue realizado en el hospital de San Fernando (C¨¢diz), en el que ya constaban las quemaduras y el desgarro producido por la penetraci¨®n anal con un objeto romo.

El segundo examen fue efectuado en el Hospital San Carlos, de Madrid, y es complementario del primero. Y el tercer reconocimiento lo realiz¨® la forense de la Audiencia Nacional Leonor Ladr¨®n de Guevara, y en el informe correspondiente tambi¨¦n consta el desgarro perineal producido por objeto romo.

En su declaraci¨®n, B¨¢rez detall¨® ayer minuciosa y exhaustivamente sus relaciones con el testigo 1964 / S en Guatemala, y especific¨® las actividades de ¨¦ste durante los siete meses que estuvo en el pa¨ªs centroamericano.

Al concluir la prueba, el juez mantuvo la imputaci¨®n del oficial de la Guardia Civil por un delito de obstrucci¨®n a la justicia en su modalidad de coacci¨®n a un testigo, recogido en el art¨ªculo 464 del nuevo C¨®digo Penal, y en concurso con los de secuestro, torturas, lesiones y agresi¨®n sexual, es decir, los delitos que corresponden al apaleamiento al testigo 1964 / S.

A pesar de que B¨¢rez fue detenido en Guatemala, el Fiscal Jes¨²s Santos no solicit¨® su ingreso en prisi¨®n. Ni siquiera solicit¨® una fianza, sino que inst¨® la libertad provisional con las medidas cautelares de prohibici¨®n de abandonar el pa¨ªs y de comparecer diariamente en el juzgado. G¨®mez de Lia?o as¨ª lo acord¨®. Ambos consideran que B¨¢rez est¨¢ implicado en la agresi¨®n, aunque se desconoce las pruebas que hay en el sumario. Las investigaciones que realizan la polic¨ªa y la Guardia Civil no han dado resultado positivo todav¨ªa.