Una bolsa de 800.000 J¨®venes para afrontar la transici¨®n
M¨¢s de 800.000 j¨®venes est¨¢n pendientes de incorporaci¨®n al servicio militar, la gran mayor¨ªa de ellos disfrutando de pr¨®rroga por estudios.Con esta bolsa, el Ministerio de Defensa podr¨ªa decidir hoy mismo, como ha hecho Francia, que todos los espa?oles que no hayan cumplido la mayor¨ªa de edad queden exentos de cumplir el servicio militar y a¨²n le sobrar¨ªan reclutas para cubrir las necesidades de las Fuerzas Armadas hasta su completa profesionalizaci¨®n en el a?o 2003.
La diferencia est¨¢ en que en Francia la objeci¨®n de conciencia es un fen¨®meno marginal, mientras que en Espa?a afecta a un tercio de los j¨®venes en edad militar y ni siquiera es posible calcular su evoluci¨®n futura. Sobre todo, tras la decisi¨®n del Congreso de reformar la legislaci¨®n vigente, como m¨ªnimo en el sentido de equiparar la duraci¨®n de la mil? (nueve meses) y la prestaci¨®n sustitutoria (13).
La experiencia demuestra, adem¨¢s, que los universitarios son los m¨¢s proclives a declararse objetores y la mayor¨ªa de los que disfrutan de pr¨®rroga por estudio tienen tal condici¨®n. Pretender cubrir las necesidades militares con los 800.000 j¨®venes pendientes de incorporaci¨®n es como transportar agua con las manos: uno no sabe cu¨¢nto l¨ªquido le quedar¨¢ al final.
Riesgos contradictorios
El manejo de la transici¨®n del reclutamiento forzoso al voluntario presenta dos riesgos contradictorios, ambos de consecuencias muy negativas, que s¨®lo podr¨¢n sortearse con extraordinaria habilidad.Si la objeci¨®n se generaliza, los cuarteles pueden quedarse vac¨ªos antes de recibir a los soldados profesionales. Si se mantiene o crece a un ritmo moderado, Defensa puede encontrarse al final del proceso con cientos de miles de j¨®venes a los que no podr¨ªan absorber los ej¨¦rcitos y a quienes tendr¨ªa que amnistiar de la mili, lo que supondr¨ªa una discriminaci¨®n respecto a los de su misma edad que no pidieron aplazamiento.
La ca¨ªda de la natalidad provoca una disminuci¨®n del 5% anual en el n¨²mero de j¨®venes disponibles, pero la reducci¨®n de las necesidades militares va a un ritmo superior, el 15% anual.
En estas condiciones, la reducci¨®n de la mili a seis meses, prometida por el PP, podr¨ªa representar una soluci¨®n, en vez de un problema, para que todos cumplan sus obligaciones militares hasta que desaparezcan.
Tambi¨¦n podr¨ªa adelantarse la fecha de entrada en vigor de la exenci¨®n del servicio militar: si en mayo se situaba la frontera en el 1 de enero de 1984, de forma que los nacidos con posterioridad ya no ir¨ªan a la mili ahora se baraja el 1 de enero de 1982.
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