Alarma en Ruanda ante la inminente expulsi¨®n de 450.000 refugiados de Tanzania

Los 450.000 refugiados de Ngara (Tanzania), la mayor¨ªa de ellos hutus ruandeses, est¨¢n a punto de iniciar un regreso masivo a su pa¨ªs. El Gobierno tanzano ha anunciado que todos deben regresar a Ruanda antes del 31 de diciembre. Les ha prometido la protecci¨®n necesaria para que el retorno sea ordeado, y humanitario. El Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) y las ONG llegadas hace un mes a Ruanda se hallan en m¨¢xima alerta, con toda la log¨ªstica -camiones, autobuses, campos de tr¨¢nsito, agua potable, hospitales de campa?a, etc¨¦tera- preparada.

El regreso de los refugiados de Tanzania se va a producir s¨®lo tres semanas despu¨¦s de la vuelta de cerca de 700.000 personas desde los campamentos en el este de Zaire. "Este segundo gigantesco retorno en tan poco tiempo es un reto tremendo para un pa¨ªs superpoblado como Ruanda, con 271 habitantes por kil¨®metro cuadrado frente a los 15,6 de Zaire", afirm¨® ayer una fuente diplom¨¢tica de la Uni¨®n Europea (UE). El Gobierno de Kigali, bajo control tutsi aunque con mayor¨ªa de ministros hutus moderados, lleva varios d¨ªas negociando con el de Tanzania. "Quieren que pospongan al m¨¢ximo el regreso de esos 450.000 refugiados para darles tiempo a estar preparados", dice un alto cargo de la ONU en Kigali. Un equipo espa?ol de M¨¦dicos del Mundo, que ayer visit¨® la zona fronteriza con Tanzania, asegura que el retorno es inminente, cuesti¨®n de d¨ªas. "No creemos que se produzca de una forma tan explosiva como el de Gisenyi (frontera con Zaire) pues con el Gobierno tanzano se puede hablar", dice su portavoz.A 20 kil¨®metros de la frontera, en el interior de Ruanda, est¨¢ situado el primer campo de tr¨¢nsito. Tiene un hospital de campa?a con capacidad para 3.000 camas. "Todo est¨¢ mucho mejor organizado, ya no nos coge por sorpresa", dice la portavoz de M¨¦dicos del Mundo. "El campo de Ngara es una verdadera ciudad (la segunda de Tanzania en n¨²mero de habitantes), con construcciones, agua y plantaciones agr¨ªcolas. No creo que los refugiados vayan a estar mejor cuando regresen".

La clave es que los refugiados ruandeses en Tanzania han o¨ªdo por la radio las noticias del regreso de sus compatriotas desde Zaire y saben que nada ha sucedido a los retornados. La diferencia de este caso con el de Zaire, es que en Tanzania hay autoridades y en Zaire, no. Los campos pr¨®ximos a Goma, Bukavu y Uvira estaban en manos de las milicias interahamwes (responsables del genocidio de casi un mill¨®n de personas en 1994). "La clave ser¨¢ saber si el Gobierno tanzano separar¨¢ antes a los interahamwes y a los soldados del antiguo Ej¨¦rcito hutu de los verdaderos refugiados", dice la fuente comunitaria.

El regreso de los refugiados representa un problema m¨¢s grave que los de Zaire, pues en esa zona del pa¨ªs se establecieron gran parte de los 700.000 tutsis que retornaron desde el exilio ugand¨¦s hace dos a?os. Estos tutsis, ganaderos sobre todo, se hicieron acompa?ar de casi un mill¨®n de cabezas de ganado. El Gobierno ruand¨¦s aprob¨® una ley que obliga a todos esos ocupantes a salir de las propiedades de los refugiados hutus antes de 15 d¨ªas.

"La clave de toda esta crisis estar¨¢ en saber si la comunidad intemacional es capaz de enfocar su ayuda al asentamiento de los refugiados y al de los que ahora van a ser desplazados", dice la fuente comunitaria. "Si no se logra, el problema que origin¨® el genocidio seguir¨¢ vivo".