Anguita bloquea la entrada como partido de Nueva Izquierda porque no se f¨ªa

No se f¨ªa ni de lo que hicieron ayer, ni de lo que han hecho hoy, ni, sobre todo, de lo que har¨¢n ma?ana. Julio Anguita no se f¨ªa de Nueva Izquierda, y defendi¨® -y gan¨®: 78 votos a favor, 43 en contra y 3 abstenciones- en el consejo pol¨ªtico de ayer que el tema de su admisi¨®n como partido volviera de nuevo a la presidencia federal y que ¨¦sta estudie elaborar un documento en el que se fijen los criterios de soberan¨ªa de IU y de los partidos integrados en ella.

Fue el de ayer uno de los debates m¨¢s vivos y, posiblemente m¨¢s duros, de los que se recuerdan en Izquierda Unida y a partir de este consejo se podr¨¢ llegar a alg¨²n acuerdo, se podr¨¢ terminar por aceptar la integraci¨®n de Nueva Izquierda. Todo podr¨¢ ocurrir, pero nada volver¨¢ a ser lo mismo en la coalici¨®n. No es tan frecuente desde luego que una decisi¨®n de la Presidencia sea revocada por el Consejo Pol¨ªtico. Y, sin duda, menos frecuente todav¨ªa que esa decisi¨®n venga respaldada por el coordinador general y el mismo coordinador general pida que se rechace. Eso fue lo que ocurri¨® ayer.Julio Anguita hab¨ªa pedido el 2 de diciembre que sus socios del PCE enterraran sus suspicacias y admitieran a Nueva Izquierda como partido dentro de Izquierda Unida. En apenas 12 d¨ªas Julio Anguita ha dado un giro absoluto a sus posiciones y ha bloqueado la entrada del partido que encabeza L¨®pez Garrido.

?Qu¨¦ ha ocurrido? Lo explic¨® el propio Anguita. Argument¨® c¨®mo despu¨¦s de aceptar el ingreso de Nueva Izquierda en IU se enter¨® por terceras personas de que esta organizaci¨®n hab¨ªa elaborado un documento que conten¨ªa dos p¨¢rrafos sobre los que el coordinador general de la coalici¨®n ha dejado caer todo, el peso de su autoridad.

El primer p¨¢rrafo en cuesti¨®n explicaba que Nueva Izquierda enviar¨ªa el documento sobre la unidad de la izquierda al PSOE, a IU y a Iniciativa per Catalunya. El segundo p¨¢rrafo dec¨ªa que Nueva Izquierda organizar¨ªa debates, grupos de trabajo y conferencias junto con otras fuerzas progresistas para buscar una alternativa a la pol¨ªtica. del Gobierno.

Julio Anguita interpreta que con estos dos p¨¢rrafos lo que hace Nueva lzquierda es conculcar los estatutos de Izquierda Unida y contradecir el esp¨ªritu de los mismos. En consecuencia, plantea que han cambiado las condiciones en que se aprob¨® el ingreso de Nueva Izquierda y, por tanto, el asunto ha de ser devuelto a Presidencia para ser nuevamente debatido.

"Los retiramos"

Lo que posiblemente no esperaba el coordinador de IU es que Diego L¨®pez Garrido en su turno de r¨¦plica le hiciera una maniobra que desbarat¨®, al menos formalmente, los argumentos de Anguita. "Si el problema", dijo L¨®pez Garrido, "son estos p¨¢rrafos, se quitan. Olvidad que estaban en el documento. Los retiramos. El primero ya hab¨ªamos aceptado retirarlo anoche. El segundo lo retiramos hoy mismo. Se acab¨® el problema".En las intervenciones siguientes hubo de todo, desde quienes pidieron que el tema no se tratara hasta que sea suficientemente estudiado por los ¨®rganos de direcci¨®n, hasta los que. sencillamente esgrimieron como argumento la "suspicacia" que sus "actitudes de ayer y de hoy" les "han despertado", como dijo Pablo Castellano.

Por cierto, que a Castellano alguien, Pedro D¨ªez, de IU de Madrid, le record¨®: "No nos despert¨® ninguna suspicacia la entrada de algunos a quienes no os hemos preguntado d¨®nde estabais en el 82 y despu¨¦s, cuando la guerra sucia, los GAL y la corrupci¨®n. Si vosotros no nos hab¨¦is despertado suspicacias, no s¨¦ por qu¨¦ otros han de despertarlas".

A Julio Anguita le doli¨® una frase de Cristina Almeida. Cristina desde la tribuna le dijo que le produc¨ªa una profunda tristeza tener que ver c¨®mo Julio Anguita hab¨ªa cedido a las presiones de sectores de Izquierda Unida para hacer el papel¨®n que hab¨ªa hecho ante el consejo. Le doli¨®. Tanto que en mitad del debate pidi¨® la palabra y present¨® una nueva propuesta, sorprendente para casi todos los que estaban en la sala. Anguita vino a decir que podr¨ªan entrar como partido si retiraban los p¨¢rrafos y adem¨¢s firmaban por escrito que conculcaban los estatutos de IU y promet¨ªan no realizar actos semejantes en el futuro.

Esa especie de confesi¨®n de los pecados, dolor de coraz¨®n y prop¨®sito de enmienda fue rechazada por Nueva Izquierda. Anguita hab¨ªa dicho para justificar ese "acta inquisitorial", como alguno lo calific¨®, que Nueva Izquierda quitaba esos dos p¨¢rrafos pero nadie garantizaba que no siguiera despu¨¦s en su misma l¨ªnea pol¨ªtica.