Cuba anuncia severas medidas contra los disidentes que apoyen la Helms-Burton

La ley Helms-Burton tendr¨¢ un efecto bumer¨¢n sobre los grupos disidentes y de derechos humanos dentro de Cuba. Como se esperaba, la Asamblea Nacional del Poder Popular de Cuba aprob¨® el pasado 25 de diciembre una legislaci¨®n especial para contrarrestar los efectos de la ley norteamericana que prev¨¦ acciones contra aquellos cubanos que reciban ayuda del Gobierno de EE UU, difundan informaciones o colaboren con emisoras de radio o televisi¨®n estadounidenses que puedan servir para facilitar la aplicaci¨®n de la ley Helms-Burton.La ley cubana no alude de forma expl¨ªcita a los disidentes, pero declara "¨ªlicitas" diversas formas de colaboraci¨®n "directa o indirecta" con la ley Helms-Burton que afectan a los grupos opositores y de derechos humanos. As¨ª, por ejemplo, uno de los art¨ªculos de la "ley ant¨ªdoto" aprobada por La Habana establece que "solicitar, recibir, aceptar, facilitar la distribuci¨®n o beneficiarse de cualquier modo de recursos financieros, materiales o de otra ¨ªndole procedentes del Gobierno de EE UU relacionados con la aplicaci¨®n de la ley Helms-Burton", es una forma de colaboraci¨®n.

Como es sabido, el Gobierno norteamericano y la ley Helms-Burton defienden como uno de los pilares de su pol¨ªtica hacia Cuba la ayuda y el apoyo material a los disidentes, algo de lo que se benefician los principales grupos opositores. La ley del Parlamento cubano define asimismo como colaboraci¨®n "difundir o ayudar a la distribuci¨®n" de informaciones o documentos del Gobierno de EE UU relacionadas con la aplicaci¨®n de la ley Helms-Burton, as¨ª como "colaborar de cualquier forma con emisoras de radio o televisi¨®n u otros medios de propaganda del Gobierno de EE UU" que facilite la aplicaci¨®n de la ley.

Seg¨²n el presidente del Parlamento, Ricardo Alarc¨®n, la ley tiene el objetivo de "proteger la inversi¨®n extranjera" en la isla y "preparar a todos los sectores sociales a fin de que conozcan muy bien ese plan de anexi¨®n contra Cuba".

El documento alude a las indemnizaciones de las propiedades nacionalizadas por el Gobierno de Fidel Castro, y dice que ¨¦stas podr¨¢n formar parte de un proceso negociador entre Cuba y EE UU, eso s¨ª, examinadas conjuntamente con las indemnizaciones que reclama el Estado cubano por los da?os ocasionados a su econom¨ªa por el embargo econ¨®mico. Asimismo, ratifica que los exiliados cubanos en Estados Unidos podr¨¢n seguir enviando remesas de dinero a sus familiares dentro de la isla sin ser "afectadas por impuesto alguno".