Espectacular recuperaci¨®n de Las Tablas de Daimiel tras m¨¢s de diez a?os de sequ¨ªa
El Parque Nacional debe ahora varios miles de millones por los trasvases realizados
El Parque Nacional de las Tablas de Daimiel se despide de la amenaza de caer en el abismo, situaci¨®n en la que le situ¨® la fuerte sequ¨ªa padecida en la Mancha durante el ¨²ltimo decenio. El r¨ªo Cig¨¹ela, tradicional suministrador de agua a este humedal de la meseta sur, ha recuperado su caudal natural y vierte durante estos d¨ªas a las Tablas m¨¢s de 800 litros de agua por segundo. A este ritmo de aportaciones, cada d¨ªa m¨¢s intenso, el parque recobrar¨¢ la normalidad en el curso del mes de enero hasta alcanzar las 1.650 hect¨¢reas, seg¨²n Manuel Carrasco, director adjunto del centro.
Las sequ¨ªas tienen su ciclo y ya puede darse por despedido el que ha tenido amenazado de muerte al Parque Nacional de las Tablas de Daimiel. Diez, doce a?os de ausencia consecutiva de lluvias sobre La Mancha, unidos al expolio de los acu¨ªferos que nutren de agua a uno de los humedales m¨¢s importantes de Espa?a, estuvieron a punto de hacerlo desaparecer del mapa.Las lluvias de enero pasado y el temporal que campa sobre la pen¨ªnsula durante las ¨²ltimas semanas tambi¨¦n est¨¢n causando impacto en este ins¨®lito humedal en plena meseta manchega. Hace unas semanas han vuelto a surgir los peque?os arroyuelos que, vierten agua desde la sierras pr¨®ximas y, lo que es m¨¢s ins¨®lito, el r¨ªo Cig¨¹ela ha vuelto a mostrar la raz¨®n de su cauce; circula agua y la vierte a las Tablas a un ritmo creciente. Estaba seco desde hace m¨¢s de diez a?os.
Seg¨²n la comisar¨ªa de aguas de la Confederaci¨®n del Guadiana, el caudal del Cig¨¹ela ha pasado en ocho d¨ªas de 100 a 800 metros c¨²bicos por segundo en el aforo situado a la entrada de las Tablas, en Villarubia de los Ojos. Esta aportaci¨®n de agua al resecado humedal es todav¨ªa insuficiente para devolverle su aspecto normal. De momento sirve para nutrir a los ca?izos y eneas que han recuperado su frondosidad e impiden observar hasta d¨®nde ha llegado realmente el nivel del agua.
Seg¨²n Manuel Carrasco, director adjunto del parque, ahora la superficie h¨²meda no ha alcanzado a¨²n las 1.000 hect¨¢reas. Queda un buen trecho hasta alcanzar el umbral de los 1.650 hect¨¢reas, m¨¢xima superficie alcanzada por las Tablas en ¨¦poca de bonanza invernal.
El pasado verano el humedal se redujo a 150 hect¨¢reas, una exigua superficie pero notable si se compara con las 30 a las que se redujo el parque natural durante el est¨ªo de 1993, cuando la amenaza de su desaparici¨®n forz¨® a las autoridades hidr¨¢ulicas a habilitar una aportaci¨®n de agua artificial desde el Acueducto Tajo-Segura. Tan grave era su estado que las aportaciones del trasvase se las trag¨® el cauce del Cig¨¹ela antes de que las aguas llegaran a la entrada del parque.
Estas contribuciones artificiales de agua se han, realizado ininterrumpidamente desde el a?o 1988 en virtud de una ley que habilita una derivaci¨®n del Acueducto Tajo-Segura. Pero la fuerte sequ¨ªa que han padecido los concesionarios del acueducto en la zona de Murcia no permitieron cubrir las necesidades del parque.
En todo caso el coste energ¨¦tico de bombear estos caudales desde la cabecera del r¨ªo Tajo hasta las Tablas de Daimiel es una factura que a¨²n no se ha abonado a la compa?¨ªa el¨¦ctrica Uni¨®n Fenosa y roza varios miles de millones de pesetas, seg¨²n ha reconocido el Secretario, de Estado de Aguas y Costas, Benigno Blanco. Se espera alcanzar un acuerdo con la compa?¨ªa el¨¦ctrica para liquidarla en plazos.
Todav¨ªa es pronto para evaluar con total precisi¨®n el nivel de recuperaci¨®n natural del parque, advierte Manuel Carrasco. Se reflejar¨¢ en el n¨²mero de aves que se acerquen a repostar en las pr¨®ximas semanas.
"En enero de 1996 contabilizamos unas mil an¨¢tidas", asegura Carrasco "pero en las buenas ¨¦pocas llegamos a inventariar 40.000 patos. Vamos a ver qu¨¦ resultado nos da el inventario que hagamos en los pr¨®ximos d¨ªas. No s¨®lo depender¨¢ del bienestar ecol¨®gico del parque, sino del climatol¨®gico".
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
?Tienes una suscripci¨®n de empresa? Accede aqu¨ª para contratar m¨¢s cuentas.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.