La venda y la herida

LAS AMENAZAS del portavoz de guardia de HB s¨®lo tardaron unas horas en ser convertidas en sangre derramada por dos pistoleros de ETA. Un tal Iribarren, que ya estuvo detenido acusado de complicidad con la banda terrorista, hab¨ªa balbuceado por la ma?ana, en Pamplona, que ante la negativa de los dem¨®cratas a atender las exigencias de ETA y HB -¨¦l lo dijo con otras palabras-, "nos vemos obligados a presagiar un futuro inmediato de gran sufrimiento". Inmediat¨ªsimo. A primera hora de la tarde, un teniente coronel, Jes¨²s Cuesta, de 50 a?os, era abatido en Madrid. Esta vez el atentado hab¨ªa sido reivindicado por adelantado, y la venda colocada antes que la herida.Las amenazas de los portavoces carecer¨ªan del efecto intimidatorio que persiguen sin el aval de los pistoleros. El a?adido de la explosi¨®n en las inmediaciones de un supermercado del autom¨®vil utilizado por ellos, que hiri¨® a una persona que pasaba por el lugar, viene a subrayar ese mensaje amenazador: nadie est¨¢ seguro, t¨² puedes ser el pr¨®ximo.

El ministro del Interior, Jaime Mayor Oreja, hab¨ªa expresado su temor de que ETA intentase inaugurar el a?o con alg¨²n atentado espectacular. Al augurar lo mismo -jugando seguramente con cartas marcadas-, el portavoz de HB se refiri¨® al ministro para decir algo as¨ª como que no le consideraba legitimado para exigir nada a los dem¨¢s mientras siguiera "apostando por la v¨ªa represiva" respecto a los presos. Tal vez el portavoz quer¨ªa as¨ª replicar a la opini¨®n de Mayor Oreja seg¨²n la cual "los que menos inter¨¦s tienen en acabar (con la violencia) son los que viven m¨¢s c¨®modamente" en esta situaci¨®n, empezando por "los de la Mesa Nacional de HB, que viven como se?oritos".

Esa diferencia entre su propia situaci¨®n y la de aquellos cuyos derechos invocan explicar¨ªa una cierta sombra de mala conciencia de HB en relaci¨®n a los presos y sus familiares, cuyos sufrimientos prolongan y manipulan por intereses miserables. Pero al acogerse a esa bandera tambi¨¦n est¨¢n poniendo la venda antes que la herida: a punto de cumplirse un a?o del secuestro de Ortega Lara, tratan de trasladar la responsabilidad del cautiverio a los dem¨¢s, contraponiendo la situaci¨®n del secuestrado con la de los presos cuyo reagrupamiento en c¨¢rceles vascas exigen. El mensaje es que la intransigencia del Gobierno respecto a los presos no s¨®lo hace inevitable prolongar el secuestro, sino nuevas intervenciones de ETA, es decir, asesinatos. Sin embargo, nadie ignora, y menos los propios presos, que ha sido precisamente la prolongaci¨®n del secuestro lo que ha impedido que progresen iniciativas en marcha para el paulatino acercamiento de los presos a sus lugares de residencia.