Esclerosis m¨²ltiple

Soy escler¨®tica, no en el sentido de cruel burla en que lo dicen muchos periodistas y comentaristas de televisi¨®n y radio, sino en el sentido cl¨ªnico, ya que tengo esclerosis m¨²ltiple. Cuando me la diagnosticaron, hace m¨¢s de 20 a?os, me dijeron que debiera buscar una buena silla de ruedas, alguien que me cuidara y que tomara cortisona..., mucha cortisona.Desde entonces hasta hoy, pens¨¦ que la actitud hab¨ªa cambiado y, cu¨¢l no fue mi sorpresa al ver el anuncio en televisi¨®n pidiendo ayuda para luchar contra mi enfermedad; se ve a varios enfermos recibiendo asistencia para levantarse de la cama o acostarse en ella, todo ello en alegres tonos blancos y negros. Si yo hubiera visto el dichoso anuncio hace 20 a?os, lo m¨¢s probable es que me hubiera metido en la cama inflada de cortisona. Afortunadamente, me inform¨¦ y s¨¦ que los afectados graves de la esclerosis m¨²ltiple, como los que se ven en el anuncio, son una estricta minor¨ªa y que los dem¨¢s podemos seguir adelante con casi toda normalidad.

No estoy para bailar el canc¨¢n, pero viajo siempre que puedo, por Espa?a y por el extranjero, muleta en alto; he tenido negocios y tal vez me meta otra vez; comparto con mi pareja las labores de la casa; me intereso por todo y, lo m¨¢s importante, mantengo alto, alt¨ªsimo, el ¨¢nimo.

Cada uno es diferente, pero yo he encontrado el alivio a mis problemas en la acupuntura, el Tai-Chi, la medicina natural y, sobre todo, el optimismo.

Jam¨¢s he tomado cort¨ªsona-