Presentan alegaciones otros 19 preseleccionados para ser jurados de un presunto homicida de dos 'ertzainas'

, Diecinueve de los 36 ciudadanos guipuzcoanos preseleccionados por sorteo para ser jurados el pr¨®ximo d¨ªa 24 en el juicio de Mikel Otegi, acusado de haber matado a tiros en 1995 a dos ertzainas en Itsasondo (Guip¨²zcoa), presentaron ayer ante la Audiencia de San Sebasti¨¢n alegaciones para no asumir esa responsabilidad. Otros ocho lo hab¨ªan hecho con anterioridad. El presidente del tribunal, Jos¨¦ Luis Barrag¨¢n, deber¨¢ resolver en tres d¨ªas si acepta esas alegaciones, que deja en s¨®lo nueve el n¨²mero de preseleccionados que no han intentado evitarlo.Simpatizante de Jarrai, la rama juvenil de la Coordinadora Abertzale Socialista (KAS), Otegi dispar¨® contra los agentes I?aki Mendiluce Etxeberri y Jos¨¦ Luis Gonz¨¢lez Villanueva cuando se encontraban realizando una vigilancia rutinaria por las proximidades del caser¨ªo donde reside. Sin embargo, ¨¦l crey¨® que iban a detenerle porque horas antes hab¨ªa tenido un altercado con otro ertzaina en un bar. El fiscal solicita para Otegi 56 a?os de prisi¨®n por los dos asesinatos mientras que el abogado de las familias de las v¨ªctimas pide 30 por cada uno. A su vez, el defensor de Otegi rebaja el delito a homicidio y reclama una pena de tan s¨®lo ocho meses.

Cuatro de los posibles jurados aseguran mantener lazos de amistad con Otegui o con su familia. Por ello Otegi, que se encontraba ayer en el Palacio de Justicia a disposici¨®n del tribunal y de las partes, fue llamado para certificar si conoce o no a esas personas. En alguno de los casos lo neg¨®.

Los restantes implicados argumentan en su mayor¨ªa que las cargas familiares les impiden pasar tanto tiempo en un juicio, que los negocios que poseen no pueden quedarse abandonados o, directamente, problemas de enfermedad.

Si el presidente de la Audiencia, Jos¨¦ Luis Barrag¨¢n, aceptara las excusas, deber¨ªa celebrarse un nuevo sorteo para elegir m¨¢s candidatos a ser jurados.

?ste es el segundo caso con jurado popular en Guip¨²zcoa. En el anterior tan s¨®lo cuatro ciudadanos de los 36 preseleccionados declinaron serlo. El asunto, sin embargo, era muy diferente. Tambi¨¦n hab¨ªa dos v¨ªctimas mortales. Pero se trataba de unos simples cr¨ªmenes de taberna, de una discusi¨®n que acab¨® a tiros.