La sombra de Tiananmen
La desaparici¨®n de Deng Xiaping deja un asunto pendiente: la revisi¨®n de lo sucedido en la plaza de Tiananmen el 4 de junio de 1989, cuando el Ej¨¦rcito, apoyado por carros de combate, aplast¨® sin contemplaciones la rebeli¨®n estudiantil causando cientos de muertos. "Tarde o temprano tendr¨¢ que haber una revisi¨®n", dice un diplom¨¢tico occidental en Pek¨ªn. Pero aqu¨ª nadie se hace demasiadas ilusiones. A menos que las m¨¢s altas esferas del Partido Comunista sufran grandes cambios, es poco veros¨ªmil que esto pase.Desde hace varios a?os se escuchan en China numerosos llamamientos en este sentido por parte de activistas pol¨ªticos y de disidentes. En 1994, siete estudiantes participantes en la demostraci¨®n de Tiananmen enviaron una carta a la Asamblea Nacional Popular en la que ped¨ªan que el Gobierno abandonara su lenguaje m¨¢s agresivo. Para el Ejecutivo, aquella manifestaci¨®n en demanda de libertad y democracia fue "una rebeli¨®n de contrarrevolucionarios" o "un disturbio". No son los ¨²nicos que piden un cambio. Tambi¨¦n intelectuales, acad¨¦micos y activistas se han sumado a la idea, reclamando, adem¨¢s, la liberaci¨®n de los que fueron encarcelados tras la revuelta de 1989.
Hasta ahora, las peticiones en ese sentido han ca¨ªdo en o¨ª dos sordos. Durante su vida, el propio Deng obstruy¨®, con ¨¦xito, cualquier revisi¨®n de las tesis oficiales. Incluso prohibi¨® que se hiciera despu¨¦s de su muerte. El liderazgo chino tambi¨¦n defendi¨®, de manera invariable, la decisi¨®n de Deng de mandar tropas del Ej¨¦rcito Popular de Liberaci¨®n. El presidente Jiang Zemin declar¨® en una ocasi¨®n: "Si el Gobierno chino no hubiera tomado medidas firmes en aquel momento, el pa¨ªs no gozar¨ªa de la esta bilidad que tiene hoy".
Sin embargo, en cualquier lucha de poder tras la desaparici¨®n de Deng, tanto reformistas como halcones podr¨ªan tener un inter¨¦s en cambiar la lectura de la historia y saldar as¨ª viejas cuentas con el pasado y ganar apoyo popular.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
?Tienes una suscripci¨®n de empresa? Accede aqu¨ª para contratar m¨¢s cuentas.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.
Archivado En
- Revueltas sociales
- Deng Xiaoping
- Matanza Tiananmen
- Represi¨®n pol¨ªtica
- Malestar social
- Gobierno
- Conflictos pol¨ªticos
- Historia contempor¨¢nea
- Partidos pol¨ªticos
- Administraci¨®n Estado
- Historia
- Problemas sociales
- Pol¨ªtica
- Administraci¨®n p¨²blica
- Matanza civiles
- China
- Derechos humanos
- Acci¨®n militar
- Asia oriental
- Asia
- Conflictos
- Sociedad