Trasiego en casa del condenado

La casa de Mario Conde, situada en la calle de Triana, en el madrile?o barrio de Chamart¨ªn, volvi¨® a tener un inusual trasiego de visitas, como cuando Conde fue encarcelado y excarcelado por el caso Banesto. Pero el ex banquero paso una jornada que, en apariencia, comenz¨® con tranquilidad. Cuando sali¨® de su domicilio a primera hora de la ma?ana miraba el reloj con frecuencia mientras esperaba el coche. Regres¨® alrededor del 12.30 horas. Tal vez, en esos momentos confiaba en la absoluci¨®n, como dijo su abogado.Poco antes antes de que se conociera p¨²blicamente la sentencia, volvi¨® a abandonarlo, posiblemente con destino al despacho de su abogado, Mariano G¨®mez de Lia?o. Conde no acudi¨® a escuchar la sentencia a la Audiencia Nacional. S¨ª, su abogado.

Una vez conocido que la sentencia le condenaba a seis a?os de prisi¨®n, el ex presidente de Banesto regres¨® a su domicilio, concretamente a las 14.45 horas, a bordo de un veh¨ªculo marca BMW de color azul marino.

Conde estuvo acompa?ado durante el resto de la jornada por varios de sus colaboradores directos en la ¨¦poca en la que presidi¨® y dirigi¨® Banesto. Entre ellos se encontraba Fernando Garro, ex director general de la entidad financiera, y G¨®mez de Lia?o.