Trabajos de media jornada

Amalur, de 20 a?os, es una estudiante de segundo curso de Magisterio en Eskoriaza por las ma?anas y trabaja por la tarde de telefonista en la cooperativa Alecop. Por este trabajo de media jornada, cuatro horas y cuarto diarias, cobra 60.000 pesetas al mes, con las que paga los gastos de la carrera. Su caso es uno m¨¢s entre los 600 alumnos de los centros vinculados a Mondrag¨®n Corporaci¨®n Cooperativa que, mientras duran sus estudios, cuentan con empleo en Alecop.

La cooperativa, surgida en la Escuela Polit¨¦cnica de Mondrag¨®n, cuenta con autonom¨ªa desde hace 30 a?os. Alecop se dedica a la elaboraci¨®n de material did¨¢ctico, relacionado en su mayor parte con la mec¨¢nica y la electr¨®nica, y al suministro de trabajos de cableado el¨¦ctrico para el sector de automoci¨®n. "El objetivo de Alecop no es la realizaci¨®n de pr¨¢cticas profesionales", explica uno de los monitores del centro. "Se constituy¨® para dar trabajo a los estudiantes, y para lograrlo se buscaron unos los productos y un mercado".

Los estudiantes de Empresariales, Magisterio e Ingenier¨ªas comparten los trabajos del taller, remachando cables o metiendo tornillos, aunque la direcci¨®n intenta colocar a cada alumno en el puesto m¨¢s id¨®neo. "El tiempo ha demostrado que podemos hacer de todo", destaca Amalur. A pesar de las dificultades que se derivan de la rotaci¨®n de personal y del trabajo a media jornada, la facturaci¨®n de Alecop alcanza los 3.600 millones anuales y consigue exportar el 15% de su producci¨®n. El paso por Alecop es, por definici¨®n, temporal. Seis meses despu¨¦s de finalizar sus estudios, los alumnos pierden el empleo. Entonces empieza la b¨²squeda de un trabajo acorde con la formaci¨®n alcanzada.