El Ejecutivo prev¨¦ un endurecimiento de las cr¨ªticas de su socio por el clima preelectoral en Catalu?a

El Gobierno desvincula un posible adelanto de las elecciones auton¨®micas catalanas del apoyo parlamentario que recibe del partido de Jordi Pujol. No obstante, tambi¨¦n cree inevitable un aumento de las cr¨ªticas verbales de su socio nacionalista por la peculiar situaci¨®n pol¨ªtica de Catalu?a, muy abierta y plagada de inc¨®gnitas como la candidatura socialista a la Generalitat que rivalizar¨¢ con Pujol. La manifestaci¨®n de Pujol este fin de semana en Barcelona al se?alar que CiU ha hecho "pasar por el aro" al PP es una expresi¨®n de ello.El Gobierno prev¨¦ que las relaciones con sus socios de CiU no van a ser las mismas que hasta ahora. Subir¨¢ el tono de las declaraciones de CiU y se va a producir un distanciamiento ante la expectativa de una precampa?a electoral en Catalu?a. Pero tambi¨¦n cree que la tensi¨®n de los discursos nacionalistas no llegar¨¢ hasta el l¨ªmite de la retirada de su apoyo al Gobierno, porque Jordi Pujol no puede cargar con la responsabilidad de eludir su respaldo a los Presupuestos de 1998, el a?o m¨¢gico del cumplimiento de los requisitos del Tratado de Maastricht.

Los estrategas de La Moncloa creen que fue muy distinta la situaci¨®n pol¨ªtica de Espa?a en 1995 cuando Jordi Pujol retir¨® el apoyo a Felipe Gonz¨¢lez y le forz¨® a adelantar un a?o las elecciones generales. En aquel momento exist¨ªa una presi¨®n pol¨ªtica y social por los esc¨¢ndalos que afect¨® a las relaciones de Pujol con el Gobierno socialista y que ahora no se plantea. Asimismo, el horizonte del cumplimiento de los requisitos de Maastricht a¨²n estaba lejano e incluso un adelanto electoral facilitaba el clima por la caiga de distensi¨®n que acarrear¨ªa.

Otro componente interviene en la previsible escalada verbal de CiU y es el proceso negociador pendiente. En primer t¨¦rmino est¨¢ la negociaci¨®n de la financiaci¨®n sanitaria. Pujol. pretende cerrar el compromiso sobre esta financiaci¨®n con el Gobierno antes de iniciar las conversaciones con el Ejecutivo sobre los pr¨®ximos Presupuestos de 1998. Quiere satisfacer previamente su reivindicaci¨®n sanitaria para no restar capacidad negociadora en otras cuestiones que tiene anotadas en su calendario, como, por ejemplo, la petici¨®n de cesi¨®n de los impuestos especiales.