Cientificos brit¨¢nicos hallan una conexi¨®n entre la anorexia y la falta de riego sangu¨ªneo cerebral
La anorexia, un desorden alimentario que inclina a sus v¨ªctimas al ayuno voluntario, a veces fatal, puede tener una causa biol¨®gica. Un equipo cient¨ªfico brit¨¢nico ha observado que una parte del cerebro de los pacientes, el l¨®bulo temporal anterior, recibe menos riego sangu¨ªneo que el resto, y es el mismo que controla el apetito, la sensaci¨®n de saciedad y la percepci¨®n visual.Precisamente, las tres ¨¢reas distorsionadas entre los menores de 9 a 16 a?os atendidos en el hospital infantil londinense Great Ormond Street. De probarse el hallazgo, ser¨ªa posible ayudarles incrementando el flujo de sangre en la zona afectada.
El psiquiatra Bryan Lask, la psic¨®loga Rachel Bryant-Waugh y el radi¨®logo Isky Gordon, han utilizado potentes esc¨¢neres para conseguir una imagen del cerebro anor¨¦xico de 18 pacientes menores de edad. En 16 casos, su riego era un 10% menor. Algunos presentaban hasta un 30% menos de la sangre considerada normal. Los tres especialistas se han mostrado muy cautelosos ante su propia investigaci¨®n, que califican de sorprendente. "La falta de flujo sangu¨ªneo puede deberse al hambre o la deshidrataci¨®n sufrida por estos ni?os. Sin embargo, tres de las chicas que se recuperaron y ganaron peso segu¨ªan padeci¨¦ndola un a?o despu¨¦s de recibir el alta", ha dicho Bryan Lask.
El tr¨ªo ha reconocido que la anorexia puede deberse a factores gen¨¦ticos, sociales, trastornos de personalidad o estr¨¦s. "Pero si probamos esta predisposici¨®n biol¨®gica seremos capaces de, ayudar al anor¨¦xico a mejorar la imagen que tiene de s¨ª mismo", a?ade Lask. Para los m¨¦dicos, decirle a los padres que no suelen tener la culpa del comportamiento del hija aliviar¨¢ tambi¨¦n la situaci¨®n familiar. Uno de cada 100 adolescentes, en su mayor¨ªa muchahas, sufre anorexia en el Reino Unido, total 70.000.
En Espa?a, los ¨²ltimos estudios se?alan, tambi¨¦n, que una de cada 100 chicas sufre anorexia, y revelan adem¨¢s que devora en edades cada vez m¨¢s tempranas: ni?as y ni?os de entre 9 y 12 a?os, que tienen en com¨²n la preocupaci¨®n por su silueta.
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