La polic¨ªa empez¨® a retirar los cad¨¢veres de los guerrilleros 24 horas despu¨¦s del asalto

Los cad¨¢veres de los 14 miembros del Movimiento Revolucionario Tupac Amaru (MRTA) abatidos por la fuerza militar que particip¨® en el asalto a la legaci¨®n diplom¨¢tica japonesa no empezaron a ser levantados por la polic¨ªa peruana hasta casi 24 horas despu¨¦s del asalto. Los restos, en bolsas d¨¦ polietileno, fueron apilados en la parte delantera de la residencia del embajador nip¨®n y, despu¨¦s, trasladados al tanatorio del hospital policial. Algunos de los cuerpos eran irreconocibles. Los cad¨¢veres de los emerretistas ser¨¢n entregados a los familiares que los reclamen.

El presidente peruano, Alberto Fujimori, dio ¨®rdenes estrictas para que la residencia permanezca durante varios d¨ªas bajo control militar y dej¨® claro que toda operaci¨®n est¨¢ en manos de las Fuerzas Armadas.A la 1.30 de la madrugada del mi¨¦rcoles Fujimori cen¨® en un restaurante chino acompa?ado de cuatro de sus ministros para celebrar el ¨¦xito del operativo militar realizado la tarde del d¨ªa anterior. A primera hora de la ma?ana, el comandante general del Ej¨¦rcito, general Nicol¨¢s Hermoza y el controvertido asesor presidencial Vladimiro Montesinos llegaron hasta la residencia donde fueron recibidos por el comando de ¨¦lite, que realiz¨® el rescate de los 72 rehenes.

La presencia de estos dos personajes fue interpretada por analistas peruanos como un s¨ªmbolo de reconocimiento a la labor desarrollada por los servicios de inteligencia de las Fuerzas Armadas. Adem¨¢s, para mostrarle a la opini¨®n p¨²blica peruana que no exist¨ªa ninguna pugna de poderes entre ambos dirigentes. Por ¨²ltimo, era una manera de darles todo el cr¨¦dito por el ¨¦xito de la operaci¨®n.

Fujimori lleg¨® a la residencia a mediod¨ªa para realizar una inspecci¨®n y recibir de los oficiales que participaron en el asalto los detalles del mismo.

Extraoficialmente se supo que en el sal¨®n principal de la residencia del embajador, situado en el primer piso, se encontraban' tres cad¨¢veres, todos ellos pertenecientes a miembros del comando del MRTA.

Poco antes de las 10 de la noche Fujimori dio una conferencia de prensa en la que, puntero en mano, detall¨® los pormenores del asalto de sus hombres ante una maqueta de la residencia del embajador japon¨¦s. Durante el d¨ªa se produjeron en Lima varias -manifestaciones espont¨¢neas de grupos de personas que lanzaban vivas al Gobierno y a Per¨² por lo que consideraban "¨¦xito" de la operaci¨®n militar. Menos satisfechos se mostraron los miembros de la Comisi¨®n de Garantes que medi¨® entre el Gobierno y los secuestradores, que en otra conferencia de prensa ofrecida por la ma?ana leyeron una declaraci¨®n en la que recordaban que fueron convocados por las autoridades 11 para contribuir en la b¨²squeda de una soluci¨®n pac¨ªfica a la crisis". El arzobispo de Ayacucho y portavoz del grupo, monse?or Juan Luis Cipriani, dijo: "La situaci¨®n concluy¨® inesperadamente para nosotros, bajo la responsabilidad y autoridad exclusiva del Gobierno peruano."