Indignaci¨®n entre los vecinos del barrio de Deusto
, El cad¨¢ver del inspector Luis Andr¨¦s Samperio, sobre su propia sangre y medio cubierto por una manta, provoc¨® la indignaci¨®n y la rabia de la mayor¨ªa de los habitantes del bilba¨ªno barrio de Deusto. Los transe¨²ntes que se agolpaban alrededor del cord¨®n policial de la avenida de Madariaga, en esta zona conocida por albergar la prestigiosa universidad situada a la orilla de la r¨ªa de Bilbao, protestaban contra los que dispararon a la cabeza del polic¨ªa de la secci¨®n de Estupefacientes.
Grupos de mujeres se echaban las manos a la cabeza y arremet¨ªan contra los asesinos con adjetivos que en otras circunstancias no se hubieran atrevido a pronunciar. Cerca de all¨ª, una colegiala tampoco reprimi¨® sus impulsos y, tras asomarse a la esquina de la calle y contemplar el cuerpo de la v¨ªctima, espet¨®: "Vaya hijos de puta..." Las dependientas de las elegantes tiendas del bulevar comercial situado frente al lugar en el que los dos pistoleros acabaron con la vida del inspector Samperio narraban c¨®mo los dos terroristas huyeron a pie.
Algunos trabajadores del centro Bidarte aseguraban que un par de muchachos estaban a escasos metros de la v¨ªctima en el momento del atentado. Pero ambos j¨®venes, seg¨²n los testigos, prefirieron la cautela y se alejaron a toda prisa cuando oyeron las sirenas de las ambulancias y de la polic¨ªa.
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