Juantxo vuelve a la Diputaci¨®n
El t¨¦cnico del Bidasoa se retira del club tras 22 a?os
Se acab¨® la excedencia. Juantxo Villarreal vuelve a trabajar desde hoy en la Diputaci¨®n de Guip¨²zcoa. Ya no gritar¨¢ como un loco ni se mover¨¢ como un tigre alrededor del banquillo del Bidasoa tras hacerlo durante 22 a?os. Dice que se va porque ahora a los 49, su cerebro puede m¨¢s que "el fanatismo selv¨¢tico que sale de las tripas, y eso es malo en el deporte de ¨¦lite". A pesar de una imagen tan visceral, el entrenador vasco es un pensador enamorado del balonmano que sabe mucho sobre la administraci¨®n de las pasiones.'En Hondarribia, su lugar de residencia, son las 09.00 horas del d¨ªa despu¨¦s. A¨²n resuena la emoci¨®n de la v¨ªspera, cuando miles de personas aclamaron al equipo del Bidasoa, asomado al balc¨®n del Ayuntamiento de Ir¨²n tras ganar la Recopa. La- calma y la enorme belleza de la bah¨ªa de Txingudi invitan a Villareal a la nostalgia: tras descender de categor¨ªa en su primer a?o como entrenador (1975), el Bidasoa volvi¨® a la Divisi¨®n de Honor, se afianz¨® y gan¨® dos Ligas, dos Copas del Rey, una Copa Asobal, una Supercopa, una Copa de Europa (1995) y una Recopa, adem¨¢s de 11 subcampeonatos.
Pero est¨¢ muy entero, y argumenta su adi¨®s: "Lo dejo porque tengo miedo a producir un desencuentro en mi honradez hacia el balonmano, que me ha dado mucho m¨¢s que yo a el. En los ¨²ltimos tiempos me faltaba la naturalidad imprescindible. Hab¨ªa pensado en llegar a los 25 a?os, pero me parec¨ªa imp¨²dico hacerlo sin esa impronta visceral. La experiencia y la reflexi¨®n deben ser un complemento de la pasi¨®n. No tengo ning¨²n derecho a frenar a gente nueva que s¨ª posee esa actitud. En el deporte de ¨¦lite no se admiten milongas".
De lo cual se deducen normas de comportamiento muy duras: "Ahora se dice mucho que si chillas no tienes raz¨®n. Pero no conozco a ning¨²n colega que haya logrado muy buenos resultados en la alta competici¨®n. utilizando s¨®lo el discurso amable".
A Villarreal le preocupa "Ia peligrosa tendencia a hipervalorar a los deportistas demasiado j¨®venes". Y tiene ideas muy claras: "Es absurdo pretender de un chaval encumbrado de 20 a?os, que cobra 500 millones, que se mate por los colores de su club durante un decenio; claudicar¨¢ al tercer a?o, ser¨¢ un veterano prematuro y podr¨¢ llegar incluso a la ruina personal. Las cosas deben ir m¨¢s naturalmente desde atr¨¢s, como dice Johan Cruyff. El proceso ser¨ªa mucho m¨¢s asumible para los deportistas si su explosi¨®n llegase a los 25 a?os en lugar de a los 1911.
El balonmano espa?ol logr¨® dos medallas de gran m¨¦rito el a?o pasado (plata en el Europeo y bronce en Atlanta) pero su popularidad ha llegado por el supuesto noviazgo de Urdangar¨ªn. Villarreal se lamenta: "No sabemos vender un producto formidable".
En consecuencia, Perun¨ªcic,
Duisheb¨¢iev, Skrbic y otras estrellas se van a la Bundesliga. Villarreal critica a todo el mundo: "No se reduce el n¨²mero de equipos de Divisi¨®n de Honor porque en las asambleas de Asobal cada uno va a lo suyo. Hay que eliminar las injerencias de la Federaci¨®n porque los clubes son quienes ponen el circo. Los jugadores pecan de un enfoque muy corto al quejarse de que los extranjeros les quitan puestos de trabajo. Por otro lado, ya sabemos que la competici¨®n m¨¢s honrada es la de todos contra todos. Ahora bien, un deporte espect¨¢culo no puede permitirse el lujo de que la emoci¨®n termine a mitad de temporada porque un equipo [el Bar?a] mantenga una hegemon¨ªa. Si la NBA, que es una empresa mod¨¦lica, funciona con una segunda fase por eliminatorias, por algo ser¨¢. En todos estos temas, el balonmano espa?ol va para atr¨¢s mientras la Bundesliga nos come la tostada".
De su larga colecci¨®n de alegr¨ªas y tristezas, Villarreal destaca el momento m¨¢s duro: 'Ta derrota ante el Milbertshoffen en la final de la Recopa de 1991. Hab¨ªa que explicar ese fracaso a los 50.000 habitantes de Ir¨²n. ?Y encima nos recibieron como h¨¦roes! Soy exagerado en la alegr¨ªa y en el sufrimiento. Por eso he dado a veces la sensaci¨®n de patetismo".
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