"Me gusta poco Madrid y mucho los madrile?os"
Hay un tranv¨ªa de trayecto es cueto entre Valencia y la Mal varrosa y otro, m¨¢s largo, invisible y sin ra¨ªles, que desde siempre ha unido Valencia y Madrid. Es la reflexi¨®n de Jos¨¦ Luis Garc¨ªa S¨¢nchez, seguro de que si Madrid se desparramara buscando el mar m¨¢s vecino, tendr¨ªa que morder el mapa de Valencia. Creci¨® este pensa miento leyendo la novela de Manuel Vicent Tranv¨ªa a la Malvarrosa, y en el rodaje de la historia hay un protagonista: se llama Liberto Rabal y naci¨® en Roma, en 1975. Entr¨® en Madrid por ?guilas, el pueblo murciano de sus veranos infantiles. Es hijo de Benito, cineasta, nieto de Asunci¨®n Balaguer, actriz, de Carmen Laforet, escritora, y del inmenso Francisco Rabal, de quien ha heredado gestos y vocaci¨®n. En su primer gran papel en cine hace de joven so?ador reprimido y puro que crece en una ¨¦poca donde todo es peca do, sobre todo si las manos alcanzan un palmo m¨¢s abajo de la cintura, ajena o propia. Pregunta. Su educaci¨®n ha sido bien distinta, por fortuna.Respuesta. Absolutamente s¨ª, se?ora. He crecido en una familia muy creativa, y eso es una suerte, aunque yo de ni?o quer¨ªa ser cient¨ªfico. Empec¨¦ con Biol¨®gicas porque quer¨ªa estudiar el comportamiento animal, hasta que supe que me interesaba mucho m¨¢s el humano. Por eso decid¨ª buscarme la vida en el cine y me lanc¨¦ de prueba en prueba hasta conseguir papeles.
P. ?Llam¨¢ndose Rabal, le ha costado tanto?
R. Hay una cosa que tengo muy clara. La gente va a seguir pensando lo que quiera de m¨ª, por mucho que yo diga. Entonces tendr¨¢ que dejar de preocuparme todo lo que no sean opiniones sobre mi trabajo.
P. Afronta usted todo este l¨ªo de la promoci¨®n con un ¨¢nimo excelente.
R. ?Y por qu¨¦ no? Te sientas en un sill¨®n y charlas. Ni me gusta ni me disgusta, me parece mucho m¨¢s descansado que un rodaje.
P. No ha parado usted de dibujar mientras charlamos. Tambi¨¦n ha escrito un libro sobre mitolog¨ªa.
R. He coescrito. La pintura y la palabra escrita son mis mejores aficiones. La imagen es otra cosa, algo mucho m¨¢s pr¨¢ctico. Con la palabra s¨ª se dice todo.
P. ?C¨®mo fue su llegada a Madrid?
R. Mi llegada fue m¨¢s bien por Aguilas, el pueblo de los veranos con mis abuelos. De esta ciudad tengo menos recuerdos, deb¨ª de conocerla con tres a?os. Ahora no puedo decir exactamente que me guste. Los madrile?os s¨ª, pero Madrid es una ciudad muy fr¨ªa, preciosa pero fr¨ªa.
P. Pero no le queda m¨¢s remedio que vivir aqu¨ª.
R. Amiga m¨ªa, ?eso no lo jurar¨ªa yo! Tienes un agente que, cuando hay trabajo, te avisa y vienes. Adem¨¢s, Madrid tambi¨¦n tiene afueras.
Tranv¨ªa a la Malvarrosa. Consultar carteleras.
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