Cambio fison¨®mico
La fisonom¨ªa de nuestro metro madrile?o ha ido cambiando poco a poco. Ayer pod¨ªamos pararnos a contemplar pa?uelos, bolsos, corbatas... ?Un sinf¨ªn de cosas que nos ofrec¨ªan nigerianos, espa?oles, alguna que otra senegalesa ... ! Ayer predominaba el color (el color de las razas, el de la vestimenta, el del producto). Disfrut¨¢bamos de la "diversidad". Hoy predomina el negro, el verde oscuro-marr¨®n y el negro-gris de los guardas de seguridad.?Qu¨¦ relaci¨®n existe entre la presencia de ¨¦stos y la ausencia de aqu¨¦llos?
?Por qu¨¦ no se permite la venta ambulante en el metro, permiti¨¦ndonos adquirir producto que nos pueden interesar; tener una visi¨®n agradable, cordial... cada uno de los d¨ªas en que acudimos al trabajo, a la cita, a la reuni¨®n o de compras?
?Por qu¨¦ quitar a los inmigrantes y a los nacionales su medio de supervivencia?
?Seguridad?
Esto no es s¨ªntoma de seguridad, sino de mezquindad y de olfato lucrativo, porque, si no, a qu¨¦ viene que nos coloquen esos quiosquillos de Frigo. Es indudable que nos quieren agradar la vida con helados y otras chucher¨ªas (deber¨ªamos exigir las condiciones de salubridad de la alimentaci¨®n expedida en el metro; si pensamos un poco, no pueden ser muy buenas). El subsuelo de Madrid se est¨¢ convirtiendo en una gran avenida comercial, se rentabiliza. ?Quiz¨¢ as¨ª el d¨¦ficit de la Administraci¨®n sea menos: por un guarda, un quiosco!
No pueden alegarnos que as¨ª estamos m¨¢s seguras y seguros. Yo me sent¨ªa segura en las horas puntas y sigo sinti¨¦ndome menos segura cuando viajo a altas horas de la noche (parad¨®jicamente, hay mucho menos personal de seguridad).
Mientras Gobierno, oposici¨®n y medios de comunicaci¨®n se debaten en temas "tan importantes" como la Ley del f¨²tbol los gobiernos auton¨®mico y local de nuestro Madrid va implantando poco a poco el control, la vigilancia y "la limpieza" de inmigrantes e indigentes en el metro y en la calle.
Si no queremos que las personas vivan de la caridad y, en ocasiones, del robo, debemos permitirles, al menos, que nos ofrezcan su mercanc¨ªa (camisetas, collares, peri¨®dicos como La Farola, La Calle) y su m¨²sica.-
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