Labores eficaces poco reconocidas

Alexis. La impecable temporada del Betis ser¨¢ recordada por Alfonso, Finidi, Jarni y hasta por Roberto R¨ªos. Sin embargo, en su centro del campo reside un hombre fundamental, Alexis. Son esos jugadores bautizados como oscuros, pero cuyo rendimiento justifica muchos de los ¨¦xitos de su equipo. En voz baja, ech¨® mano de todo su f¨²tbol para poner criterio en la distribuci¨®n del juego y una rara habilidad para templar o agilizar el ritmo. Adem¨¢s, tuvo gol: marc¨® seis tantos, cuatro de penalti.lligner. Ser¨¢ el madridista menos recordado de este t¨ªtulo, pero ha tenido mucho que ver en ¨¦l. Apenas ha dibujado intervenciones espectaculares o palomitas salvadoras. Pero tampoco se le recuerdan cantadas. El l¨ªder no puede echarle la culpa de ninguno de sus tropiezos. El Madrid cambi¨® el modelo espectacular de sus porteros, pero le vino bien. Regular y sobrio.

Luis Enrique. 17 goles. Estuvo siempre en el sitio justo y en el momento adecuado. Trabaj¨® siempre por y para el equipo, tanto en ataque como en defensa. Sigue igual de acelerado, pero su f¨²tbol produce beneficios. Adem¨¢s, este a?o ha encontrado el cari?o que le falt¨® en el Madrid, algo que le ha dado un importante plus a su juego.

Esn¨¢ider. Deja la temporada como el malo del Atl¨¦tico. Su car¨¢cter conflictivo tal vez le haga acreedor a este galard¨®n, porque ha tenido roces con su entrenador, con compa?eros, con ¨¢rbitros y con rivales. Pero su juego merece m¨¢s alabanzas que reproches. Jug¨® fuera de sitio, porque no es un delantero centro, pero eso no es una responsabilidad que le corresponda. A¨²n as¨ª, pele¨® hasta la extenuaci¨®n en cada partido, supo abrir las defensas enemigas y su cuota de asistencias y goles (16) result¨® m¨¢s que aceptable. Pag¨® el penalti fallado ante el Ajax, pero fue el ¨²nico que mostr¨® valor para tirarlo.

C¨¦sar. El guardameta del Valladolid es uno de los principales responsables del billete para Europa. Sin demasiado ruido, se ha metido entre los cinco mejores porteros espa?oles. Antic lo quiere para el Atl¨¦tico, pese a Molina, al precio que sea. Seguro, mand¨®n y dotado de todos los rasgos que la modernidad exige a los porteros.

Ezequiel Castillo. Futbolista de toque y criterio. Ha pasado en voz baja durante toda su carrera, pero su repertorio merece ser gritado con may¨²sculas. En el Rayo le han concedido los galones que antes le hab¨ªan negado. Aunque es un jugador fundamentalmente de complemento, ha sabido asumir riesgos y meter sentido y gusto a un equipo pobre en calidad.