Los rockeros prefieren "Jalisco"

"Se nota que hay cari?o, que es la dinamo que alimenta toda revoluci¨®n", dijo Santiago Auser¨®n, ahora Juan Perro, dirigi¨¦ndose a los asistentes cuando acab¨® su intervenci¨®n en el concierto celebrado el martes en Madrid a favor de los guerrilleros zapatistas. Por esa velada solidaria desfilaron casi una quincena de artistas espa?oles y un aut¨¦ntico mariachi mexicano. Ante la ausencia de un buen sonido, los altibajos de los participantes, la incomodidad de una sala abarrotada, el calor sofocante en una noche que no era calurosa y la ausencia de un maestro de ceremonias que fuera presentando a cada artista, el p¨²blico contest¨®, precisamente, con cari?o. Y al final, gracias al mariachi, a?adi¨® el baile patoso y el regocijo. Se trataba de reunirse con poetas, escritores y cantantes en torno a una idea: compartir el sentimiento rom¨¢ntico de que en alguna parte del mundo, a¨²n se puede ensalzar al hombre por encima de todo. Ya se sabe, desde hace a?os, en la selva de Chiapas, al sur de M¨¦xico, se ha organizado una resistencia que encabeza el subcomandante Marcos al frente del Ej¨¦rcito Zapatista de Libera ci¨®n Nacional (EZLN). Inspira dos en el legendario Emiliano Za pata, l¨ªder de la lucha por la libertad y contra la opresi¨®n, estos modernos zapatistas organiza ron en la primavera de 1996 el Primer Encuentro por la Humanidad y contra el Neoliberalismo. Quieren ahora celebrar otro a partir del 26 de este mes en diferentes puntos del Estado espa?ol. Para toda la gente que se va a movilizar hab¨ªa que crear una infraestructura y este con cierto era otra forma de proveer se de recursos.

Al iniciarse el acto, Isabel Escudero, compa?era del profesor Agust¨ªn Garc¨ªa Calvo, ley¨® una carta del propio Marcos para la ocasi¨®n. Un v¨ªdeo con escenas de la vida en Chiapas y declaraciones del l¨ªder guerrillero dio paso a las actuaciones. El escenario, presidido por la imagen de Zapata y la bandera del EZLN, acogi¨® a Mercedes Ferrer, Frank T. y al escritor Jes¨²s Ferrero. Detr¨¢s vinieron Corcobado; Cristina, de Dover, en plan Joan Baez, y uno de los momentos m¨¢s delirantes: Manolo Kabezabolo, mediante descarnado punki, no dej¨® t¨ªtere con cabeza -desde Aznar, a ritmo de La chica yey¨¦, hasta el mismo Rey- y fue el ¨²nico al que se le pidieron m¨¢s canciones. Juan Perro, Andr¨¦s Calamaro -que record¨® al reci¨¦n fallecido Pepe Risi, de Burning-, Robe Iniesta, de Extremoduro, y el guitarrista flamenco Pepe Habichuela dieron paso a Agust¨ªn Garc¨ªa Calvo.

Ley¨® La balada de las c¨¢rceles madrile?as y el p¨²blico rockero y rebelde hizo un inusitado silencio, llegando a corear con ¨¦l algunos versos. Josele, de Los Enemigos, y Ant¨®n Reixa finalizaron la presencia espa?ola y lleg¨® el momento m¨¢s divertido.

Bernardino, un charro de peso, sali¨® con un genuino mariachi al grito de "?viva Zapata!". Los rockeros sucumbieron y ensayando t¨ªmidos y patosos bailes no tuvieron m¨¢s remedio que rendirse a la fuerza de grandes cl¨¢sicos como ?Ay, Jalisco! El rey, Volver, volver, Adelina o el himno zapatista, Carabina 30/30.