"Sevillanas de la mujer cuadrado"
Un espect¨¢culo de cabar¨¦ recrea la vida de dos siamesas unidas por la cadera
Todo apunta a un montaje desenfadado y gracioso cuando las siamesas de El Puerto aparecen en el escenario. Lo hacen como sombras chinescas, tras una s¨¢bana blanca sujeta con pinzas a una cuerda de colgar la ropa. ?ste ser¨¢ el ¨²nico decorado de la obra, suficiente para presentar ante el p¨²blico una escena de cama, un parto, tres muertes y n¨²meros varios con m¨²sica y baile, protagonizados todos ellos por dos mujeres unidas por la cadera.Las siamesas del Puerto es el nombre del espect¨¢culo que la compa?¨ªa Riesgo representa durante este mes en la sala Cuarta Pared. Se trata de una historia inspirada en un relato de Hermann Kinder y en personajes reales: dos monstruos que iban de feria en feria a finales del siglo pasado y un cient¨ªfico empe?ado en estudiarlos.
Las siamesas de El Puerto son en realidad losune Onraita y Arantxa Zambrano (de 27 y 25 a?os, respectivamente), dos actrices que un d¨ªa tuvieron que aprender a no dar ni un solo paso con el pie cambiado. "Al principio cre¨ª que ser¨ªa un trabajo dif¨ªcil, pero gracias a ellas no fue as¨ª. Enseguida empezaron a clonarse. Durante los ensayos ten¨ªan las mismas enfermedades, llegaron a ensamblarse", cuenta Andr¨¦s Lima, director de la obra y autor del texto. A las dos protagonistas les une tambi¨¦n un aparatoso sistema oculto bajo la ropa. Pero nadie explica en qu¨¦ consiste.
Concentraci¨®n bajo la ropa
"Al principio sud¨¢bamos tinta para preparar este papel. Ibamos pegadas horas y horas.Ahora ha llegado un momento en que me da igual ir sola o con ella. Nunca nos hemos ca¨ªdo", comentan las actrices. ?Qu¨¦ secreto guardan bajo la ropa? "Concentraci¨®n", dicen al un¨ªsono.
"Mi idea era olvidar el morbo de la historia y dar paso a los sentimientos del ser humano. De hecho, la gente se olvida de eso durante la funci¨®n", dice Lima.
Otra aportaci¨®n del director ha sido situar la historia en El Puerto de Santa Mar¨ªa y convertir a estas dos bellas mujeres en una salerosa pareja de artistas de tablao.
Hasta unas sevillanas se marcan (Las sevillanas de la mujer al cuadrado) con el acompa?amiento en directo de una guitarra cuyos acordes gu¨ªan la obra de principio a fin.
La funci¨®n es un espect¨¢culo de cabar¨¦ en el que, c¨®mo no, se le hacen gui?os al p¨²blico. Pero por partida doble, porque la unidad en ¨¦ste son dos, y al paciente espectador de la mesa de la segunda fila se le sientan en las rodillas un par de actrices. Y luego tiene que plantar cara a un bombardeo de bromas que llegan desde dos frentes. En casi una hora de funci¨®n, hay cante, y muy sentido. Hay baile, humor, un poco de brujer¨ªa y tambi¨¦n drama. "Drama por la muerte, porque ninguna quiere ser la primera y ninguna la ¨²ltima en morir", se dice en un momento de la funci¨®n.
En la compa?¨ªa Riesgo dicen que es una comitragedia, porque la obra arranca con humor y termina en drama. "Empieza siendo una historia de circo o de investigaci¨®n y al final se convierte en una historia de amor", dice el director.
El caso es que este montaje, que naci¨® hace tres a?os para representarse en peque?os locales o garitos de copas, ha viajado por caf¨¦s y teatros de toda Espa?a. Se estren¨® en un local de Malasa?a, pas¨® a Casa Patas, luego a la sala Tri¨¢ngulo, a Surist¨¢n y m¨¢s tarde viaj¨® por Alicante, Sevilla, M¨¢laga, Extremadura y Segovia. Hac¨ªa un a?o que la compa?¨ªa Riesgo, formada por un equipo de 10 personas que trabajan juntas desde hace tres a?os, no repon¨ªa la historia de Las siamesas del Puerto.
Las siamesas del Puerto, en la sala Cuarta Pared (Ercilla, 17; metro Embajadores) hasta el 27 de julio. De mi¨¦rcoles a domingo, a las 22.00. 1.500 pesetas.
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