"Los extranjeros aportamos en Hollywood m¨¢s pasi¨®n al trabajo", afirma Guillermo del Toro
El director mexicano de 'Cronos' estrena 'Mimic', una superproducci¨®n de terror
Hace cuatro a?os, Cronos, una imaginativa pel¨ªcula mexicana sobre un anticuario vampiro (interpretado por Federico Luppi), sorprend¨ªa en el Festival de Cannes y ganaba' el premio de la Cr¨ªtica. Ayer, su director, Guillermo del Toro, estrenaba su segundo largometraje en 2.000 cines de EE UU, Mimic, con un colosal despliegue publicitario, un presupuesto de 30 millones de d¨®lares (4.590 millones de pesetas), un reparto encabezado por Mira Sorvino y un gui¨®n sobre letales insectos gigantes que acechan en Manhattan. Esta pel¨ªcula de terror puro abre las puertas de Hollywood a este inquieto director mexicano de 32 a?os, que afirma: "En Hollywood los extranjeros aportamos m¨¢s pasi¨®n al trabajo".
Pero, ?qu¨¦ diferencias ha encontrado al trabajar en una industria tan distinta? "Para el cine mexicano el gran problema es conseguir el dinero, mientras que en el americano tienes que luchar por los aspectos art¨ªsticos. Pero, b¨¢sicamente, el proceso es el mismo, la herramienta es id¨¦ntica. A nivel t¨¦cnico esa transici¨®n no es traum¨¢tica" .Tampoco su recibimiento en Hollywood ha sido duro: "Lo importante aqu¨ª es conservar tu personalidad, tu estilo. La industria americana siempre ha adoptado a gente de fuera como Billy Wilder, Hitchcock o Lubitsch, que ven¨ªan de Europa. Ahora lo hacen tambi¨¦n con hispanos, pero no creo que exista un boom latino en Hollywood. Los extranjeros quiz¨¢ aportemos m¨¢s pasi¨®n al trabajo. Yo trato de meterme en todos los aspectos del rodaje, mientras otros directores guardan m¨¢s las distancias. Lo importante es que toda la gente que pase por la industria americana trate de ayudar y promover el cine de su pa¨ªs, lo importante es tratar de aprovechar el apoyo que puedo conseguir en EE UU con Mimic, poder agrandar la colaboraci¨®n entre Hollywood y el cine de mi pa¨ªs. Si no creas lazos y trabajas s¨®lo como individuo aislado nunca se va a producir ning¨²n boom".
Producida por la cada d¨ªa m¨¢s poderosa Miramax, Mimic naci¨® con la idea de convertirse en un cortometraje de 30 minutos, que formar¨ªa parte de la pel¨ªcula conjunta Light years, completada con los episodios de otros tres j¨®venes directores. Pero cuando Guillermo del Toro present¨® la idea, Bob Weinstein -jerifalte de Miramax- le respondi¨®: "El concepto es bueno. Hagamos un largometraje con esto". As¨ª naci¨® esta pel¨ªcula g¨®tica de ciencia ficci¨®n en la que Del Toro ha tenido que cambiar de estilo narrativo: "Cronos era una pel¨ªcula m¨¢s personal y yo mov¨ªa la c¨¢mara de una forma m¨¢s contemplativa. En Mimic se mueve con m¨¢s fluidez y la historia es m¨¢s accesible, para grandes audiencias".
"Mimic hace referencia a la imitaci¨®n, a esa virtud que tienen los insectos de copiar el aspecto de otros animales. Por eso en la pel¨ªcula parecen humanos en algunos momentos", a?ade Guillermo del Toro. "La pel¨ªcula es una gringada de terror, pero qued¨® muy bien".
En ella reaparecen los temas que fascinan a Del Toro: la ciencia, la religi¨®n, los engranajes de las m¨¢quinas y la crueldad de la infancia, elementos presentes en su primera pel¨ªcula, Cronos. Del Toro, que se confiesa admirador de Bu?uel y Hitchock -sobre quien escribi¨® un libro a los 25 a?os- reconoce que contar con mucho m¨¢s presupuesto respecto a su primera pel¨ªcula no le ha quitado el sue?o. "El rodaje en dos enormes escenarios de Toronto que reproducen las tripas subterr¨¢neas de Manhattan fue especialmente duro, porque las condiciones eran terribles: como los decorados representan t¨²neles con agua, era complicad¨ªsimo evitar que aquello se inundara. Tambi¨¦n mover los robots de los insectos sin que se les viera el motor que llevaban a la espalda era cosa de locos", recuerda este vecino de la ciudad de Guadalajara, padre de una ni?a de un a?o. "Me llev¨¦ a mi mujer y a la peque?a a Canad¨¢. Aunque apenas las ve¨ªa, porque rod¨¢bamos 20 horas diarias y algunas jornadas enlazaban con el d¨ªa siguiente".
El esfuerzo parece que ha valido la pena. El p¨²blico a¨²lla en varios momentos de la pel¨ªcula, en otros se retuerce en la butaca ante ese espect¨¢culo de sombras, viscosidades y p¨¢nico. "La pel¨ªcula funciona estupendamente. Si consigues aguantar algunas cosas, claro", bromea el c¨ªneasta. Guillermo del Toro recorrer¨¢ Am¨¦rica y Europa presentando la superproducci¨®n. Dentro de unos d¨ªas se proyectar¨¢ en el Festival de Venecia -en la secci¨®n no competitiva Mezza Nolte (Medianoche)- y despu¨¦s ir¨¢ a Deauville.
Algunos espectadores se sorprender¨¢n viendo a Mira Sorvino en una pel¨ªcula de acci¨®n, suspense, y efectos especiales como ¨¦sta. Galardonada con el Oscar a la mejor actriz de reparto de 1995 por su papel de ingenua prostituta en Poderosa Afrodita, de Woody Allen, Mira Sorvino fue elegida por el director mexicano porque no quer¨ªa una estrella, "sino una actriz que transmitiera el miedo que siente", dice Del Toro. En esta pel¨ªcula, la hija del actor Paul Sorvino se enfrenta sin sofisticadas armas a su terrible enemigo. "En Mimic, los humanos son tan fr¨¢giles como nosotros, gente corriente ante un peligro inesperado. Y nadie elige ser un h¨¦roe si puede decidir otra opci¨®n: las circunstancias le fuerzan a ello", finaliza el cineasta antes de despedirse para acudir a una comida de trabajo con el actor Rupert Everett con quien le gustar¨ªa contar para nuevos proyectos: una revisi¨®n moderna del mito de Fausto que se titular¨¢ El puente de Mephisto, basado en la novela Spanky, del brit¨¢nico Christopher Fowler; y un western g¨®tico que transcurre durante el siglo XVIII en M¨¦xico, llamado Montecristo.
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