Cuidar al hidalgo

Durante muchos a?os dudamos de la inclusi¨®n del ballet Don Quijote en el repertorio del Ballet Nacional de Cuba. Por respeto a nuestras ra¨ªces culturales, nos sent¨ªamos obligados a tratar con especial cuidado un t¨ªtulo que se asociaba a la obra cumbre de la literatura espa?ola. Y, francamente, en muchas versiones coreo gr¨¢ficas que conoc¨ªamos no quedaba muy bien defendido el glorioso hidalgo.Por eso, finalmente emprendimos, en un trabajo en equipo, una revisi¨®n concienzuda de la obra coreogr¨¢fica, replante¨¢ndon¨®s su dramaturgia, persiguiendo una mayor coherencia entre la m¨²sica y la coreograf¨ªa y, sobre todo, cuidando del personaje de Don Quijote. Y eso sin traicionar el estilo cl¨¢sico, y conservando todo lo que sin lugar a dudas pertenece al original de Petipa.

El resultado ha sido este espect¨¢culo, lleno de vida y colorido, un gran divertimento que nunca aburre, con un importante despliegue t¨¦cnico de los solistas y del cuerpo de baile. Puede verse en la obra, en consecuencia, un tratamiento cari?oso y lleno de respeto hacia el caballero de la triste figura. Nos sentimos muy honrados por presentar en Espa?a este ballet, inspirado en un episodio de la obra de Cervantes, precisamente en el 450? aniversario del gran escritor. Es nuestra forma de unirnos a tan significativa celebraci¨®n.