A Joe Cocker, uno de los blancos del 'blues', le resulta dif¨ªcil aceptar que no es un negro
El cantante presenta su disco 'Across from midnight' y empieza una gira por Europa
Cuando Joe Cocker habla, uno se pregunta d¨®nde ha dejado la intimidante fiereza que suele exhibir encima del escenario. El cantante se expresa de forma pausada y tranquila, como si a sus 53 a?os ya nada pudiera alterarle o asombrarle. Un nuevo disco, Across from midnight, y una larga gira por toda Europa le han obligado a dejar su rancho en Colorado para promocionar su trabajo. Ayer, en Madrid, este brit¨¢nico afincado en Estados Unidos desde hace 20 a?os y considerado uno de los grandes cantantes blancos de blues, se?al¨®: "Todav¨ªa hoy, cuando me despierto, me cuesta aceptar que no soy un negro". Sobre su nuevo disco, el cantante a?adi¨®: "Es m¨²sica para adultos".
En 1968 Joe Cocker dejaba su oficio de fontanero para colocarse en el n¨²mero uno de las lista de ventas brit¨¢nicas gracias a su versi¨®n de la canci¨®n de los Beatles With a little help from muy friends. En su ¨²ltimo disco, el cantante tambi¨¦n incluye la versi¨®n de otro cl¨¢sico: Could you be loved, de Bob Marley. "Siempre hago versiones de viejas canciones. No pretendo superar al original, es un homenaje, una forma de divertirme". Y contin¨²a: "Adem¨¢s, el reggae tiene mucho que ver con el blues, son ritmos raciales, de la tierra".A Joe Cocker (cuyos espasmos sobre el escenario se convirtieron en los a?os setenta en su principal se?a de identidad) se le etiqueta hoy como uno de los grandes cantantes blancos de blues. Ray Charles dijo de ¨¦l que era el ¨²nico blanco capaz de cantar con alma negra, pero el cantante prefiere hablar de t¨¦cnica antes que de alma. "Cantar como un negro es s¨®lo una t¨¦cnica vocal que muchos blancos usamos; lo hago yo, y Mick Jagger y muchos otros", afirm¨® ayer el cantante en Madrid ante un grupo de periodistas.
"Siempre me eduqu¨¦ con m¨²sica negra y las ganas de simular su fuerza me hac¨ªa olvidar que no lo era", afirma. "Pero la realidad es que todav¨ªa hoy, cada ma?ana al despertarme, me enfrento con una realidad que me cuenta asumir: no soy negro y no puedo hacer nada por evitarlo". El m¨²sico a?ade: "A m¨ª me gusta esa vieja expresi¨®n que dice ?Acaso un bluesman canta a los blancos?".
A Cocker le espera una larga gira por Europa. S¨®lo en Alemania (el pa¨ªs junto con Francia donde m¨¢s discos ende) realizar¨¢ 40 recitales. En Espa?a actuar¨¢ dentro de as¨ª un a?o, "creo que a principios del pr¨®ximo verano" aclara. "Una vez que estoy en la carretera, dentro de la gira, me mentalizo del trabajo que me espera. El problema es cuando estoy en casa y pienso en tantos meses fuera. Pero en cuanto me re¨²no con los m¨²sicos y me pongo en marcha ya me siento preparado f¨ªsica y mentalmente"'
El cantante vuelve al trabajo cuando s¨®lo le separa un a?o de su anterior disco, Organic, una recopilaci¨®n de nuevas y viejas versiones producidas por Don Was. "Bueno, aquel disco no estaba previsto. Yo pensaba descansar una temporada, pero surgi¨® y no lo rechac¨¦. Le sigui¨® una gira peque?a, muy diferente a la de ahora".
Cocker, que de momento descarta, su retirada de los escenarios, cree que con los a?os ha perdido ciertos matices de su potente voz, pero ha ganado en otros. "Desde luego los a?os cobran factura y ya no tengo falsete en las notas muy altas. Pero tengo un buen amigo que me dice que a medida que mi voz envejece adquiere m¨¢s giros, se hace m¨¢s profunda, gana en modulaciones".
Para adultos
Across from midnight es un disco (el vig¨¦simo de su carrera) con 12 temas que recuerdan al Cocker de los ¨²ltimos a?os el de las baladas rotas de la banda sonora de las pel¨ªculas 9 semanas y media o de Oficial y caballero. "Hago discos para adultos. Con buenas letras y melod¨ªas fuertes. Creo que s¨®lo llego a la gente joven que escucha los discos que compran sus padres, supongo que esos son los adolescentes que veo en mis actuaciones. Pero soy consciente de que, no tengo nada que hacer con los j¨®venes a los que les gusta el techno o el pop. Lo siento, pero no puedo hacer nada por ellos".
Babelia
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