El derecho de asilo
No hay pruebas que demuestren que la familia iran¨ª que solicitaba asilo pol¨ªtico en Espa?a fuera realmente perseguida en su pa¨ªs por sus creencias religiosas (cat¨®licas). ?stos son los motivos que expone el Gobierno para denegar la solicitud. La familia tiene cinco d¨ªas para abandonar Espa?a, y si no lo hace ser¨¢ devuelta a su pa¨ªs -deportada es la expresi¨®n correcta- por consider¨¢rsela ilegal.No s¨¦ por qu¨¦ nuevo principio del derecho se ha invertido aqu¨ª la carga de la prueba para volver al sistema inquisitivo, a la presunci¨®n de culpabilidad. Si esta familia no se atreve a pedirles a sus parientes residentes en Ir¨¢n que traten de probar los hechos alegados en la solicitud, si no est¨¢n dispuestos a someter a sus parientes al peligro de una lapidaci¨®n o a otro mecanismo de tortura, entonces corren el riesgo de no merecer cr¨¦dito del ministerio. "Un Estado de derecho se rige por la ley. Como la ley exige pruebas... ".
Supongo que para calmar a los ciudadanos sensibles a esta situaci¨®n, pedir¨¢n "serenidad y reflexi¨®n". Parece como si el Gobierno, en su pretensi¨®n de suprimir el derecho de asilo entre los pa¨ªses de la Uni¨®n Europea, pretendiera hacer a sus socios una demostraci¨®n por reducci¨®n al absurdo: una familia iran¨ª no puede demostrar el acoso del que es v¨ªctima en su pa¨ªs, luego, cuando menos, ?podr¨¢ hacerlo un ciudadano europeo!
Quiz¨¢ ¨¦sta sea una nueva l¨®gica emergente con la que se pretende inducir al abandono de un derecho que ha protegido a tantos espa?oles. Se comienza pidiendo su supresi¨®n en Europa y luego -mejor dicho, ahora- se act¨²a para neg¨¢rselo al resto.-
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